Tragedia en una familia de Estados Unidos tras conocerse la muerte de cuatro de sus miembros en un mismo accidente de tráfico.
En dicha desgracia, un padre de familia y sus tres hijos menores de edad han muerto tras precipitarse con su coche por un acantilado.
Todo ocurrió el pasado sábado 10 de junio cuando Calvin Miller, un hombre de 36 años, reunió a sus tres hijos de dos matrimonios diferentes para ir a visitar a su padre que se encontraba ingresado en cuidados paliativos en una clínica del estado de Idaho.
En este viaje con el que iban a recorrer parte del país, Calvin Miller juntó a su hija Dakota Miller, una adolescente de 17 años con licencia para conducir, y a sus otros dos hijos menores de ocho y diez años.
Su intención era visitar por última vez al abuelo de la familia ya que se encontraba ingresado en estado muy grave. Para ello, la familia recorrería las carreteras de los estados del país en coche.
En uno de los trayectos, Calvin Miller le pidió a su hija adolescente que le hiciese el relevo en la conducción y así él podría descansar un poco. Sin embargo, la adolescente de solo 17 años se quedó dormida mientras conducía y el coche acabó chocando contra unas rocas y precipitándose por el río Salmon.
Al caer al agua, los cuatro ocupantes quedaron atrapados dentro del coche y murieron ahogados. Fue otro conductor que pasaba por la carretera el que vio el coche hundido en el río y dio aviso a los agentes de la Policía.
Tras rescatar los cuatro cadáveres dela familia, los policías dieron aviso a las madres de los menores de edad y a la actual pareja de Calvin Miller para comunicarles la triste noticia. Completamente conmocionada y devastada, Zella Blair, la madre de los dos niños pequeños, ha confesado en una entrevista al medio de comunicación 'KREM ' que no se imagina la vida sin sus pequeños.
"No sé si puedo acostumbrarme a que no entren por la puerta después de la escuela y me griten de nuevo", confesaba entre lágrimas llenas de dolor la mujer.
Ahora, la madre de Dakota Miller, la adolescente que perdió el control del vehículo, Zella Blair, madre de los dos niños fallecidos, y la viuda de Calvin Miller han unido fuerzas y entre ellas se apoyan en este duro trance que está pasando la familia.