El vocalista de la banda de heavy metal Rammstein, Till Lindemann, vuelve a estar en el centro de atención, esta vez de la Fiscalía de Berlín, que confirmó este miércoles que ha abierto diligencias contra el artista por presuntos abusos sexuales contra jóvenes seguidoras de la banda. El alemán se suma a otros artistas demandados por la misma causa como el cantante de country Jimmie Allen. Además Lindemann es acusado de suministro de sustancias narcotizantes como presunto medio para mantener realciones sexuales con dichas jóvenes.
Una portavoz identificada como Karen Sommer, declaró que la investigación se había abierto "a raíz de denuncias de terceros" así como de oficio.
El vocalista de la popular banda de heavy metal Rammstein, Till Landemann, es sospechoso de haber cometido actos "del ámbito de los delitos sexuales y del suministro de sustancias narcotizantes", señaló Sommer. Además, explica que por el momento, la fiscalía no puede proporcionar más detalles para no poner en peligro la investigación y no poner en riesgo los derechos de Lindemann y de sus posibles víctimas. Hace varias semanas, una joven de origen irlandés denunció que en un concierto de la banda en Vilna, Lituania, el vocalista le suministró drogas supuestamente con el fin de que mantuviesen relaciones sexuales.
Después de esa denuncia, otras mujeres decidieron ofrecer sus testimonios a través de diversos medios alemanes e internacionales, en los que denuncian la existencia de un supuesto sistema en torno al cantante para captar a jóvenes con las que pudiera tener relaciones sexuales tras los conciertos, según informa 20 minutos. Este método consiste en que la directora de casting del artista, Alena Makeeva, las preselecciona y les pregunta si quieren acudir a la fiesta posterior a uno de sus conciertos, en las cuales tal como exponen, Lindemann les ofrece alcohol y drogas sin consultar su edad.
Makeeva ha sido acusada de reclutar a chicas entre sus fans para ofrecérselas al líder del grupo y más concretamente, la investigación se habría iniciado por un delito recogido en el artículo 177 del Código Penal alemán, que regula la agresión sexual, la coacción sexual y la violación.
El periódico alemán Bild recoge el testimonio de la influencer Kaya Shyk, quien publicó un video de 37 minutos (que sumó un millón de visualizaciones en 24 horas) en el que desvelaba su experiencia después de ser captada por Makeeva. "De repente me di cuenta de que estaba allí como un objeto sexual", aseguró.
Algunas de las denunciantes afirman haberse sentido intimidadas o incluso violentadas por la actitud de Lindemann, mientras que otras declaran de forma directa que el cantante abusó de ellas o que han presenciado como otras chicas parecían estar drogadas a su alrededor. Por su parte, la policía lituana afirmó que no seguiría investigando la denuncia original contra el cantante por falta de pruebas, pero en Alemania, dado que allí es muy popular, la controversia ha aumentado rápidamente desde la noticia.