La ONG alemana Campact ya ha logrado más de 161.000 firmas para exigir a las cadenas de supermercados de Alemania que dejen de vender fresas procedentes de España para no contribuir a la desecación del Parque Nacional de Doñana.
Esta semana el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se hacía eco del intento de boicot en redes sociales. En el sector preocupa la imagen que puedan estar dando de ellos. Lo cierto es que parece que ha habido más polémica que impacto real en los supermercados alemanes donde se han vendido fresas onubenses con normalidad y la campaña ha coincidido además con el final de la temporada de este producto en España. Allí ahora es el momento de la fresa local que madura más tarde. Tampoco lo han notado los productores españoles. Algunas cadenas se han pronunciado y han emitido un comunicado en el que aseguraba que sólo trabajan con productores que hacen un uso razonable y sostenible del agua de regadío.