El Gobierno de Francia ha fijado un mínimo en 3 euros a los gastos de envío de los libros comprados en Amazon y otras plataformas digitales. El objetivo de la medida es proteger a las librerías tradicionales, muy afectadas al enfrentar la “competencia desleal” que supone la venta online.
La medida, establecida y firmada por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, entrará en vigor el próximo 7 de octubre, y sigue las recomendaciones de la Autoridad de Regulación de Comunicación Electrónica, Correos y Distribución de Prensa (Arcep), que ya en abril de 2022 había propuestola tarifa mínima de 3 euros en gastos de envío para todos los pedidos de libros inferiores a 35 euros.
El decreto no afecta, sin embargo, a los pedidos superiores o iguales a 35 euros, para los que el precio mínimo estará en 0,01 euros.
El objetivo del Gobierno de Francia es incentivar la compra en las librerías del país, que conforman una de las redes más densas del mundo con unas 3.500 librerías, que venden aproximadamente la mitad de los libros comercializados en Francia.
Las librerías tradicionales físicas no pueden competir en muchas ocasiones con los precios de distribución que ofrecen las plataformas digitales (el precio del libro es, en principio, fijo en Francia), y en particular Amazon, que acapara buena parte del mercado.
El Sindicato de la Librería Francesa (SLF), que concentra a cerca de un tercio de las librerías independientes, pedía una tarifa mínima de 4,5 euros, más elevada que la aprobada ahora por el Gobierno.
El Gobierno de Macron explica que su decisión de los 3 euros por el aumento de la inflación en el país, así como para respetar las normativas europeas de libre mercado. «Esta medida constituye un primer paso para reequilibrar la competencia entre minoristas en el mercado de la venta en línea de libros», considera en cualquier caso el SLF, que critica la "casi gratuidad" de los pedidos superiores a 35 euros y pide una tarifa postal ventajosa que permita "hacer a las librerías verdaderamente competitivas".
El decreto se enmarca en la conocida como ley Darcos del 30 de diciembre del 2021 sobre el mercado del libro, una actualización de otra ley de 1981, que ya sufrió modificaciones motivadas por el creciente peso del comercio electrónico y, en particular, de Amazon.
En e 2014, se prohibió al gigante tecnológico añadir gastos de envío gratuitos a aquellos libros que ya se vendiesen con una rebaja del 5 % del precio (máximo descuento fijado por ley).