Las brutales medidas de un 'call center' contra sus trabajadores si no cumplían objetivos: les quitaban la silla
Un 'call center' mexicano obliga a trabajar sin silla a sus empleados si no cumplían con los objetivos impuestos por la empresa
Ha sido una antigua trabajadora la que ha denunciado la situación laboral de sus compañeros en las redes sociales
A juicio una empresa que tenía contratados a 85 becarios que trabajaban como empleados
Las redes sociales se han convertido en una gran aliada de todos aquellos trabajadores que sufren o han sufrido algún tipo de explotación laboral. Con solo un mensaje y una fotografía en la que se demuestre esta situación de precariedad o explotación, muchos usuarios han denunciado el trato vejatorio por parte de sus jefes o superiores en sus puestos de trabajo.
Una de estas últimas denuncias que han corrido como la pólvora a través de las plataformas sociales ha sido el de una mujer mexicana que ha querido compartir con todos sus seguidores el maltrato recibido en su antiguo puesto de trabajo.
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Las brutales medidas del 'call center'
Al parecer, esta supuesta víctima trabajaba como telefonista en un 'call center' llamado Nexoit situado en la ciudad mexicana de Naucalpan de Juárez. Según su versión, los trabajadores de esta empresa estaban obligados a vender una cierta cantidad de productos.
En el caso de no llegar a estos objetivos, sus superiores tomaban medidas disciplinarias para que así los empleados aumentasen las ventas. Estas medidas disciplinarias llegarían hasta quitarles a los empleados las sillas donde trabajaban.
De esta forma, los operadores tenían que trabajar de pie o sentados en el suelo hasta que cumpliesen los objetivos impuestos por sus superiores. "Momentos que me mantienen humilde. Trabajé en la compañía Nexoit, donde si no vendías te quitaban las sillas y hasta que vendieras te la regresaban", denunciaba la antigua empleada que destapó toda esta situación de explotación y precariedad laboral.
Junto a esta denuncia, la mujer adjuntaba una imagen en la que se podía ver a varios de sus compañeros sentados en el suelo mientras continuaban trabajando.
Nada más compartir su testimonio y las pruebas gráficas que le daban veracidad, sus redes sociales se llenaban de mensajes en los que sus seguidores y otros usuarios anónimos criticaban las medidas del 'call center' y pedían que se realizase una investigación para que así los actuales trabajadores de Nexoit no tuviesen que sufrir estos castigos laborales.