Presentes en Siria desde hace veintitrés años, y concretamente en Alepo desde hace cuatro, buscan ahora vías para llevar toda esta ayuda a la zona en la que trabajan. "Hemos hablado con aerolíneas, con el Ejército español, con empresas", explica la presidenta de Rescate Internacional, Flavia Hohenlohe.
El objetivo: transportar las donaciones a destinos como Doha o Abu Dhabi. Desde allí "el Gobierno sirio podría llevarlo hasta Damasco y después a Alepo", explica el director general de la oenegé.
Si es difícil llegar a la zona controlada por el gobierno, más lo es al territorio dominado por los rebeldes. Solo hay tres pasos fronterizos para paliar tanto sufrimiento.
"Tenemos una situación de terremoto encima de lo que fue un brote de cólera", afirma la portavoz de UNICEF en la zona del terremoto, Carmen Monclus.
La infancia, muy golpeada. "Hay más del 40 por ciento escuelas han sido destruidas. Y ya el 44 por ciento de los niños no tenían acceso a la educación desde antes", añade Monclus.
Por el conflicto armado ya había casi tres millones de desplazados. Ahora son 11.000 más las familias sin hogar. Según MSF, se necesita de manera urgente más ayuda internacional para cubrir las enormes necesidades en el noroeste del país.