El drama del sirio Ahmad: "He perdido a 25 miembros de mi familia en el terremoto tras escapar de la guerra"

Es imposible asimilar tanto dolor. Ahmad Idris no puede creer lo que ha sucedido. Este sirio desplazado de 40 años, que tuvo que abandonar su hogar por la guerra, ha perdido ahora a 25 miembros de su familia. Los terremotos que golpearon Siria y Turquía el lunes han acabado con la mayoría de sus seres queridos. En una morgue improvisada en la localidad de Saraqib, llora a sus muertos, que yacen allí mismo envueltos en mantas.

Aun en shock, y entre lágrimas, cuenta a The Associated Press que él y su familia huyeron de la guerra en búsqueda de un lugar seguro. "Pero al final, ¿cómo nos ha alcanzado el destino?", se lamenta mientras observa incrédulo los cuerpos. "Me duele el corazón con todo lo que ha pasado, con todo lo que ha pasado... Nunca pensé que algo así podría pasar", repite.

"Perdí a mi hija, a dos nietos, a la familia de mi esposa, al padre de mi esposa, a la madre de mi esposa, a sus hijos, a la familia del suegro de mi hija, a la suegra de mi hija y a sus hijos, uno de los cuales tenía hijos, una familia numerosa... Es un total de unas 25 personas", explica incrédulo. y roto de dolor

"Huimos de la guerra. Miren la injusticia que nos persigue y lo que nos pasó. Vinimos aquí para buscar un refugio seguro para nosotros y nuestros hijos. Pero al final, miren cómo nos atrapó el destino", repite Idris.

Tras 12 años de guerra, los efectos de los seísmos son un golpe insoportable para la población siria. Los esfuerzos para hacer llegar la ayuda encuentran los obstáculos propios de un territorio en conflicto con zonas aisladass controladas por los rebeldes aisladas y rodeadas por las fuerzas gubernamentales del presidente Bachar el Asad. Naciones Unidas ha dicho que está "explorando todas las vías" para llevar suministros al noroeste controlado por los rebeldes.

Más de 11.000 personas han muerto en los terremotos que golpearon Siria y Turquía en la madrugada del lunes. La OMS estima que el número de fallecidos podría alcanzar los 20.000. Los equipos de emergencia trabajan contrarreloj en la búsqueda de supervivientes.