El terremoto de 7,6 grados de magnitud que esta madrugado ha afectado Turquía y Siria sigue dejando una reguero de muertes y de destrucción que los medios de comunicación están mostrando en pleno directo. Horas después de que se sintiese el primer temblor, las cadenas de televisión han desplazado hasta la zona afectada a sus equipos de reporteros para informar de la tragedia.
Uno de los periodistas destacados al lugar ha podido vivir en primera persona lo que supone verse expuesto a un terremoto como este que los expertos califican de largo e intenso. En medio de la confusión y mientras contaba la tragedia de los ciudadanos que huyen de los peligros de derrumbamiento, una réplica del sismo ha vuelto a afectar a los edificios que rodean el punto de directo del periodista. La confusión es total entre los ciudadanos que se ven envueltos por una nube de polvo que apenas deja ver lo que está ocurriendo.
Durante unos terribles segundo solo se escuchan gritos y se nota el miedo en las palabras entrecortadas del periodista que, a pesar del grave riesgo que corre no deja de informar de la situación. Cuando la tierra deja de templar, el reportero vuelve a tomar el control de la situación, momento en el que surge de la nube de polvo una madre con sus dos hijos que ha logrado sobrevivir al colapso de los edificios. Es en ese momento cuando el reportero, prefiere ayudar a esta mujer y toma entre sus brazos a una de los menores para alejarla del peligro de los cascotes.