Berlín "no se opondría" a que Polonia enviara tanques Leopard 2 a Ucrania. Lo ha dicho la ministra de Exteriores de Alemania, después de que su país se opusiera a mandar los potentes carros de combate a Kiev.
"Es cierto que hay reglas de control, pero, de momento, no nos han preguntado, pero si ocurriese, nosotros no nos opondríamos", ha dicho Annalena Baerbock, en una entrevista a una televisión francesa este domingo.
Polonia es el país que más ha presionando a Alemania para que autorice el envío de tanques Leopard 2 que ha pedido con insistencia el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, quien los considera importantes para contrarrestar la invasión rusa.
Polonia, por su parte cuenta con más de 200 tanques Leopard, y si tiene intención de enviarlos a Ucrania, Alemania no tendría inconvenientes. Estos carros de combates, fabricados por Alemania, necesitan la autorización del fabricante para ser exportados a terceros.
Este fin de semana, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el canciller alemán, Olaf Scholz, han mostrado su apoyo a Ucrania, aunque no se comprometieron a enviar más tanques para Kiev.
Los ministros de Exteriores de la Unión Europea buscarán este lunes aprobar una nueva tanda de 500 millones de euros del fondo para suministrar armamento a Ucrania.
Frente a la intención mayoritaria de los Estados miembros de aprobar una nueva ronda de 500 millones, la séptima desde el inicio de la guerra, para sufragar el envío de armas a Ucrania, con el veto de Hungría que rechaza la decisión, en nuevo frente abierto en su rechazo a las medidas de apoyo a Ucrania y para aumentar la presión sobre Rusia.
Rusia, por su parte, ha advertido, sobre el envío de armas a Ucrania, amenazando con que esto conducirá a una "catástrofe global".
"Dada la superioridad tecnológica de las armas rusas, los políticos extranjeros que tomen este tipo de decisiones deben comprender que esto podría acabar en una catástrofe mundial que destruiría sus países", amenazó el presidente de la Duma Estatal de Rusia, la cámara baja del Parlamento ruso, Viacheslav Volodin, en su canal de Telegram.