La 'tortura' en el calabozo de Eva Kaili, exvicepresidenta del Parlamento Europeo

La tortura de Eva Kaili, otrora poderosa exvicepresidenta del Parlamento Europeo, continúa. Así califica su abogado su estancia en el calabozo con frío, con la luz permanente y sin poder lavarse. La exvicepresidenta del Parlamento Europeo Eva Kaili, detenida en la prisión de Haren desde el 9 de diciembre en el marco del Qatargate, deberá permanecer en prisión al menos un mes más. La Justicia belga ha confirmado este jueves la prisión provisional de la eurodiputada socialista griega Eva Kaili, imputada hace seis semanas por su presunta participación en la trama de sobornos pagados por Qatar y Marruecos para ganar influencia en las instituciones de la UE. El abogado de Eva Kaili se había quejado previamente de la prolongada detención de su cliente que ha calificado como "una tortura".

Se da la circunstancia de que el exeurodiputado socialista Pier Antonio Panzeri, principal imputado en Bélgica por la trama de presuntos sobornos pagados por Qatar, facilitará detalles sobre el 'modus operandi', los países implicados y nombres de quienes sucumbieron a las corruptelas a la Justicia belga, en virtud de un acuerdo alcanzado por sus abogados y la Fiscalía federal a cambio de reducir su condena.

Los términos del acuerdo entre las dos partes implican que la sanción que se aplique a Panzeri será "efectiva pero limitada", si bien el confesor no evitará la "prisión firme, una multa y la confiscación de todos beneficios patrimoniales adquiridos", precisa el comunicado, que estima en al menos un millón de euros esas ventajas.

El abogado de Kaili defiende que ella "es inocente y no sabe nada de los asuntos entre su pareja Francesco Giorgi y el propio Panzeri", también en la cárcel por cargos de asociación delictiva, corrupción y blanqueo de capitales. De hecho, pidió la liberación de Eva Kaili con medidas alternativas como un brazalete electrónico u otro tipo de medidas similares " en protesta por las condiciones en las que se encuentra detenida la eurodiputada del Pasok:

"Estuvo detenida durante 16 horas en una celda de la policía, no en una prisión; con frío , ya que le quitaron el abrigo; la luz estaba siempre encendida, lo que le impedía dormir. No se le permitió lavarse a pesar de que estaba menstruando", según destaca el Corriere DellaSera.

Y no se quedó ahí el abogado que lanzó todo un órdago: "Estos comportamientos violan el Convenio Europeo de Derechos Humanos, son torturas y nos retrotraen a la Edad Media. Les pido que hagan públicos estos hechos: porque el hecho de que se conozcan representa el alma de la justicia. Sigo esperando que el proceso sea justo: porque estamos en Europa".

"Lo que más le sigue doliendo a Eva Kaili es la distancia con su hija de apenas 23 meses. Después de verla durante dos horas el 6 de enero en Haren, la vio solo una vez más", dijo su abogado. “En seis semanas en prisión, solo tuvo la oportunidad de ver dos veces a su hija de 23 meses. Para nosotros, se trata de una ruptura con el sentido común" y con "medidas adecuadas a la situación". 

Kaili, que ocupaba una de las vicepresidencias del Parlamento Europeo hasta que fue destituida por el escándalo de corrupción, niega su implicación en los hechos y sus abogados habían pedido su puesta en libertad. Sin embargo, la Fiscalía pidió que se mantuviera en prisión por existir a su juicio tanto riesgo de juicio como de destrucción de pruebas, según adelantaron los abogados de Kaili en declaraciones a la prensa que acudió al Tribunal. Finalmente, la Cámara del Consejo de Bruselas (tribunal de primera instancia) ha escuchado los argumentos de la Fiscalía y "confirmado la prisión preventiva", según ha informado la propia fiscalía en un comunicado.

Además de la socialista griega permanecen en prisión preventiva otros tres imputados por participación en organización criminal, blanqueo de capitales y corrupción, entre ellos su pareja, el asistente parlamentario Francesco Giorgi, y Niccolo Figa-Talamanca, responsable de la ONG 'No Peace without Justice'. El cuarto imputado es el exeurodiputado socialista Pier Antonio Panzeri, fundador de la ONG 'Fight Impunity' a través de la que se vehicularon contactos con eurodiputados, y considerado el 'cabecilla' de la trama. Esta misma semana, la Fiscalía federal anunciaba un acuerdo con Panzeri por el que éste se compromete a confesar. Eva Kaili, mientras tanto, seguirá con su tortura