Viktor Bout, también conocido como "el mercader de la muerte", ha sido liberado recientemente por Estados Unidos a cambio de Brittney Griner, una baloncestista que estaba presa en Rusia desde febrero de este año acusada de tráfico de drogas, después de que en un aeropuerto de Moscú las autoridades le encontraran aceite de cannabis en su equipaje, una sustancia ilegal en el país.
Este criminal, es conocido debido al tráfico de armas. Siendo uno de los principales negociantes de estas por todo el mundo. Ahora ha sido puesto en libertad a cambio de Brittney Griner. El intercambio se realizó el pasado jueves en un aeropuerto de Abu Dabi, la capital de Emiratos Árabes Unidos.
Tras el intercambio, ambos presos han sido indultados según ha informado el vicepresidente de la rama rusa del Comité Internacional para la Defensa de los Derechos Humanos, Ivan Melnikov, por lo que "no es necesario que cumplan sus condenas en sus propios países".
El "mercader de la muerte" fue arrestado en 2008 en Tailandia a petición de Estados Unidos como responsable de multitud de intercambios de armas y condenado a 25 años de prisión. Condena que ha estado cumpliendo en una cárcel del país hasta que el pasado 08 de diciembre fue liberado.
Nacido en Tayikistán en 1967, un país del centro de Asia gobernado por entonces la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), rápidamente se convertiría en uno de los oficiales más temidos del ejército del aire soviético. Desde allí comenzaría sus negocios sucios utilizando los aviones militares abandonados que el imperio soviético, que estaba apunto de derrumbarse, tenía durante la década de 1990, según recoge el libro publicado en 2007, 'Mercader de la Muerte', escrito por los expertos en seguridad Douglas Farah y Stephen Braun.
Con estos aviones, capaces de realizar aterrizajes forzosos en perfectas condiciones en pistas de aterrizaje llenas de baches, se sospecha que comenzó a realizar sus primeras entregas de mercancías relacionadas con el tráfico de armas, sobre todo en países de África los cuales estaban siendo arrasados con la multitud de guerras que se levantaron. Por estas guerras, en 2003, el ministro de Relaciones Exteriores británico Peter Hain lo denominó por primera vez como el "mercader de la muerte", alegando que era "el principal conducto para los aviones y las rutas de suministro que llevan armas... desde Europa del Este, principalmente Bulgaria, Moldavia y Ucrania, hasta Liberia y Angola".
Así mismo, según unas investigaciones periodísticas realizadas en Oriente Medio, Bout sería uno de los principales comerciantes de armas de Al-Qaeda y los talibanes. Aunque este negó dichas afirmaciones, pero sí que reconoció que envió armas a Afganistán para fomentar la lucha contra los talibanes.
Finalmente, los negocios turbios de Bout concluyeron en 2008 cuándo fue detenido en Tailandia tras una larga operación de la inteligencia de EEUU que le hizo caer en una trampa.
Agentes de la agencia antidrogas (DEA), se camufló como un potencial proveedor de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). El grupo guerrillero, ahora disuelto, que aterrorizó al país y a los que Bout le suministraba las armas. Tras su detención, fue condenado a 25 años de cárcel por un Tribunal de Nueva York por varios delitos: conspiración para matar a ciudadanos y funcionarios estadounidenses, lanzar misiles antiaéreos y ayudar a una organización terrorista.