El volcán de Villarrica, en Chile, amenaza con desatarse y activa la alerta amarilla
El volcán de Villarrica ha obligado a activar la alerta amarilla en Chile ante un incremento de su actividad
Es uno de los volcanes con más erupciones en Sudamérica y cerca de él se ubican centros poblados con importante actividad turística
El volcán más grande del mundo entra en erupción en Hawái tras casi cuatro décadas dormido
Chile permanece pendiente de la evolución del volcán Villarrica, ubicado en el límite de las provincias de Cautín y Valdivia, en la cordillera de los Andes, tras decretarse la alerta amarilla por un incremento en su actividad. La situación, –que se produce mientras en Hawái la erupción del Mauna Loa no deja de generar ríos de lava tras su nuevo despertar–, está siendo monitoreada constantemente.
El volcán de Villarrica es, según subraya el propio Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) de Chile, uno de los que posee el mayor registro histórico de erupciones de toda Sudamérica. Con una forma cónica casi perfecta y reconocible desde gran distancia, se trata de un estratovolcán localizado en el extremo occidental de una destacada cadena volcánica que alinea el Villarrica con el Quetrupillán y el Lanín.
MÁS
Cerca de él, a sus pies, “se ubican centros poblados con importante actividad turística, donde destaca la ciudad de Pucón”, de más de 28.500 habitantes. De ahí la imperiosa necesidad de no perder ningún detalle sobre la evolución del volcán, que de continuar incrementando su actividad sería una gran amenaza para esta parte de la ciudadanía.
Con un cráter abierto de 200 metros de diámetro, una fumarola continua y un lago de lava que es casi permanente, el Villarrica no ha dejado de emitir gases en las últimas horas.
El volcán Villarrica obliga a activar la alerta amarilla: no ha dejado de emitir gases
“Durante la madrugada de este 1 de diciembre, las condiciones meteorológicas favorables permitieron apreciar la mayor intensidad y altura de incandescencia en el volcán, la cual oscilo entre 80 y 220 metros sobre el nivel de su cráter, y observada desde sectores distantes al volcán. La constante emisión de gases y altas anomalías térmicas reportadas en días anteriores son coherentes con el fenómeno observado en las últimas horas”, ha señalado Sernageomin en un comunicado, en el que indican que “otros parámetros de monitoreo no muestran variaciones significativas”, por lo que, por el momento, y sin perder de vista al Villarrica, se mantiene la alerta amarilla.
“El área de afectación en el escenario actual corresponde a un radio de 500 metros desde el centro del cráter”, precisan.
Los vecinos, entre la expectación y la incertidumbre respecto a la evolución del volcán
En el lugar, algunos expertos, aficionados y vecinos se han desplazado para observar desde la distancia la espectacularidad que deja su imagen durante la noche. Muchos de ellos reconocen “no tener miedo” aún, pero quienes viven en las proximidades ya han pensado en prevenirse ante una escalada de la situación y una eventual evacuación: se vive “la incertidumbre de tener las cosas básicas, que es el agua, algunas cosas preparadas, mochilas con alguna muda de ropa… Todo el mundo que ha vivido erupciones volcánicas dice que la mayoría de los años ha sido siempre de noche y de madrugada. Por eso, en realidad estamos preparados, pero nada de miedo. Como nunca hemos vivido una experiencia así, no tenemos temor aún”, expresa una mujer que reside en una de las poblaciones que se verían amenazadas si la actividad del volcán continúa incrementándose.