Un hombre ha sido detenido por intentar secuestrar a su propio hijo, de apenas un año, en Florida, en Estados Unidos. Las cámaras corporales de los agentes de policía de la localidad muestran el peligro que se vivió durante el arresto: el hombre usó al pequeño para protegerse.
Los agentes tuvieron que gritarle en varias ocasiones: "Baja al niño, baja al bebé", pero Brandon Leohner de 27 años, siguió usando a su hijo como escudo humano después de habérselo llevado a la fuerza de casa de su novia.
A pesar de que las autoridades le apuntaban con pistola taser, el hombre no soltaba al pequeño. Finalmente uno de los agentes disparó y, de inmediato, le quitó al menor de sus brazos.
El pequeño, de solo un año, no dejaba de llorar llamando a su padre mientras el hombre intentaba huir corriendo de los agentes. Hasta cinco policías se abalanzaron sobre él para evitar su huida. Durante más de un minuto, los policías, con todo su peso, le sujetaron por el cuerpo y los tobillos, y hasta soltaron al perro policía, que terminó mordiéndole en la pierna.
El joven está detenido acusado de secuestro, usar a un menor como escudo, conducción temeraria y resistencia a a la autoridad.