El príncipe Harry y su mujer, Meghan Markle, han puesto rumbo a Escocia para estar junto a la reina Isabel II, cuyo estado de salud preocupa a los médicos. La monarca, de 96 años, se encuentra en el castillo de Balmoral, donde permanece bajo supervisión de los doctores.
Los duques de Sussex se reunirán allí con el príncipe Carlos y con Camilla, quienes se apresuraron en acudir a la finca. También han viajado hasta allí el príncipe William, la princesa Anne, el príncipe Andrew y Sophie Wessex.
El hecho que los cuatro hijos estén acompañando a su madre se está interpretando en Reino Unido como un indicio más de la gravedad de la situación.