Un terremoto de magnitud 6.8 en la escala Richter sacude el suroeste de China: al menos 30 muertos
Un terremoto de magnitud 6.8 en la escala Richter ha sacudido a la provincia de Sichuan, al suroeste de China
El seísmo ha provocado importantes deslizamientos de tierra y ha dejado al menos 30 víctimas mortales
El terremoto se ha sentido a 200 kilómetros de distancia, en la capital de Sichuan, Chengdu
Al menos 30 personas han muerto en un terremoto de magnitud 6.8 en la provincia de Sichuan, en el suroeste de China, según ha informado el Centro de Redes Sismológicas del país asiático (CENC). El seísmo también ha provocado multitud de destrozos materiales en numerosos puntos.
Sichuan, una zona donde se registran regularmente terremotos
MÁS
El fuerte temblor, que ha hecho estremecer a todos los que aún tienen muy presente el recuerdo del desastre ocurrido en 2008, –cuando otro terremoto, aquella vez de magnitud 7.9, sacudió Sichuan dejando más de 80.000 muertos–, ha provocado además importantes deslizamientos de tierra, golpeando especialmente una zona montañosa del condado de Luding, en la citada provincia. Hablamos de una zona en la que se unen las placas tectónicas y que registra terremotos regularmente.
Concretamente, el seísmo se ubica a 39 kilómetros de este, a 47 kilómetros de la ciudad de Kangding y a 226 de Chengdu, la capital de provincia. Además, ha tenido una profundidad de 16 kilómetros, generando importantes daños en viviendas y establecimientos, y provocando interrupciones en el suministro eléctrico, así como en la circulación, con algunas carreteras llenas de enormes rocas por los deslizamientos de tierra en la zona.
El terremoto se ha sentido a 200 kilómetros de distancia
La intensidad del terremoto ha sido tal que se ha sentido incluso a 200 kilómetros de distancia, en la capital de Sichuan, Chengdu, donde la mayoría de sus 21 millones de residentes permanecen confinados por un brote de covid, siguiendo el estricto protocolo chino de tolerancia cero frente al SARS-CoV-2.
El seísmo, además, golpea a la región tras una ola de calor y sequía que ha dejado escasez de agua y cortes de energía, dada la dependencia de Sichuan de la energía hidroeléctrica. En este contexto, la provincia sube un nuevo golpe mientras se teme que la cifra de víctimas mortales siga aumentando.