Cuando se cumplen tres meses del inicio de la invasión rusa, Ucrania resiste. La furia de Moscú se ha trasladado al Donbás, donde sus tropas avanzan, pero a un ritmo muy lento. La situación en la zona es extremadamente difícil, en palabras del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, que ha vuelto a poner sobre la mesa una reunión con Vladimir Putin para llegar a un acuerdo de paz.