Joaquín Sabina, icono y leyenda de la música española, ha anunciado su retiro de los escenarios tras una extensa y fructífera carrera que ha abarcado más de cinco décadas.
La gira Hola y adiós será su despedida definitiva, marcando el final de una era y dejando un vacío difícil de llenar en el panorama musical, poniendo fin a su carrera en vivo.
Así lo ha confirmado este pasado jueves 4 de julio en su cuenta oficial de las redes sociales tras concluir con su gira Contra todo pronóstico.
"Ya sé que en la última gira, alguna vez, aunque no en voz muy alta, dije que esa sería mi última gira grande. He cambiado de opinión. Lo pasé tan bien y fue tan emocionante estar en América, en España y en más lugares con mis músicos sobre el escenario, que he decidido hacer una última gira de despedida. Tanto que se va a llamar Hola y adiós. Esta sí será de verdad la última. Empezará a finales de enero de 2025 en América y luego en Europa, y espero que nos veamos ahí. Un abrazo grande. Sé que no me vais a fallar, yo prometo no fallar tampoco", ha señalado Sabina.
Así, el veterano artista ofrece a sus seguidores la oportunidad de despedirse del cantante que les ha acompañado con su música en este último medio siglo.
Los conciertos prometen ser emotivos y memorables, con un repertorio que incluirá sus mayores éxitos como 19 días y 500 noches, Y nos dieron las diez y Pongamos que hablo de Madrid. Cada actuación será un viaje a través del tiempo, recordando los momentos icónicos y las canciones que han definido la carrera de Sabina.
Mientras se prepara para el que será su último hito en la industria musical en directo y en un recinto multitudinario, Sabina se tomará unos meses de descanso.
Aprovechará lo que queda de 2024 para disfrutar de unas merecidas vacaciones, estar junto a su familia y dejar todo a punto para su gran momento.
Lo cierto es que las letras de las canciones de Joaquín Sabina siempre han reflejado la turbulenta vida del artista, rodeado de musas de carne y hueso y excesos.
Han sido varias las mujeres que han pasado por su vida, sin embargo, ahora sólo hay una a la que llama Princesa. Se trata de Jimena Coronado.
Además de sus hijas, Rocío y Carmela, la mujer que ocupa su corazón es Jimena. La Rosa de Lima y Joaquín Sabina se conocieron en Perú, cuando él fue a presentar un disco y ella acudió enviada por un periódico para hacer unas fotos en un hotel.
Jimena y el jienense son pareja desde 1999 y se casaron en 2020 después de romper su relación con Isabel Oliart, madre de sus hijas e hija del político Alberto Oliart, exministro del Gobierno del UCD.
Junto a Coronado mantiene una relación de lo más discreta y alejada del foco mediático. Lo mismo que con sus dos hijas. Tal ha sido la protección del cantautor sobre sus hijas ante los medios que pocas son las fotografías familiares o las imágenes que se tienen de ellas.
Junto a las mujeres de su vida se prepara para su último tour, el que se espera que se desarrolle sin ningún tipo de contratiempos.
Han sido varias las ocasiones en las que Sabina ha tenido que cancelar o posponer sus conciertos por la "mala salud de hierro" a la que siempre se ha referido el propio artista y que le persigue desde hace décadas.
En 2001 sufrió un infarto cerebral y se vio inmerso en una importante depresión, lo que le llevó a abandonar los escenarios un tiempo.
En 2010 otro susto llegó a su vida. Sufrió una caída en su casa que le obligó a cancelar uno de sus conciertos en el Palau de la Música de Barcelona. Un año después tuvo que cancelar tres conciertos en Estados Unidos y México por problemas intestinales a raíz de una diverticulitis aguda.
En febrero de 2020 se cayó del escenario del Wizink Center y sufrió varios traumatismos, un ingreso hospitalario en la UCI y dos intervenciones. Eso sí, ninguno de los baches de salud del poeta le ha frenado a la hora de emocionar y congregar a sus fans con su música.
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