Arranca la vendimia, marcada por el cambio climático y la falta de personal en Galicia

  • La vendimia se adelanta entre 8 y 10 días por los efectos del cambio climático

  • El aumento de las temperaturas: una amenaza para el sector primario

  • Cada vez hay menos mano de obra en las semanas de vendimia

Llega septiembre y con este mes de vuelta al cole, a la rutina y al día a día también se acercan unas fechas clave para el sector vinícola: la vendimia. Este año comienza particularmente pronto, entre 8 y 10 días antes de lo habitual, y la razón está en los efectos del cambio climático.

Pero, ¿por qué hay que recoger antes la cosecha? ¿Cómo afecta el cambio climático a la uva? “En su acidez, si tardamos más en recoger la uva, los vinos serían más pesados… Para mantener su frescura hay que adelantar la vendimia”, así lo constata Miguel Tubío, director técnico de las Bodegas Martín Códax. 

El director asegura que en estos vinos elaborados al lado del mar, la frescura es una nota particularmente importante, “es el alma de nuestros vinos”. 

Una “amenaza real” para el sector primario

Este cambio en la producción no se da únicamente en el sector del vino. Luis Planas, Ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación aseguraba ayer mismo que el cambio climático es “una amenaza real” que afecta al sector primario. 

En el caso de la uva, desde las bodegas gallegas aseguran que es un problema generalizado y que sufren en la producción de vinos gallegos como el Albariño pero también en variedades de otras zonas de la península: “en el Mediterráneo las temperaturas son más extremas que aquí, así que notan los efectos del cambio climático más incluso”. 

Y cada vez son menos

Pero este adelanto de la vendimia no es el único cambio al que se están enfrentando desde los viñedos gallegos, porque cada vez son menos las personas que se animan a participar en esta actividad.

Los capataces agrícolas, como Telmino Balboa, lo ven en su día a día: “ahora mismo manejamos cerca de 150 personas, pero nos cuesta mucho trabajo encontrarlas”. Un trabajo temporal, que dura aproximadamente unas tres semanas y que requiere esfuerzo físico. “Los primeros días lo sufres, pero es cogerle el truco y vas en piloto automático”, asegura José Rubiera que hoy comienza su segunda temporada como vendimiador. 

A pesar de las complicaciones… Buenas previsiones

Este año está siendo propicio para la maduración de la uva en Galicia. Después de un invierno y una primavera de abundantes lluvias, llegó el sol y las temperaturas altas, aunque no extremas, por lo que las hojas se encuentran en el punto perfecto de maduración y acidez. 

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