Investigan en Pontevedra a una madre y su hija por amenazar y encerrar a un fontanero en su vivienda
Disconformes con la reparación de su calentador, lo encerraron con llave para impedir que saliese
El fontanero denunció que la hija le puso un abrecartas sobre el abdomen para impedirle escapar
La Justicia descarta la acusación de “secuestro” porque sólo fueron 15 minutos pero investiga el uso del abrecartas
La Audiencia de Pontevedra investiga a una madre y a su hija que fueron denunciadas por un operario que acudió a su vivienda para reparar un calentador y fue retenido allí durante quince minutos porque la clienta no había quedado satisfecha con la reparación y la factura.
El hombre denunció los hechos ante el Juzgado de Instrucción número 3 de Vigo, añadiendo, además, que la hija le había puesto un abrecartas sobre el abdomen para impedirle escapar.
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Ante la negativa de la jueza de Vigo a seguir con la investigación, que consideró “un episodio insignificante y fugaz”, el fontanero acudió a la Audiencia de Pontevedra, donde se reiteró la decisión de archivar la denuncia por “secuestro”, pero se ordenó continuar la investigación respecto al delito leve de amenazas o coacciones con el abrecartas.
El desacuerdo tenía que ver con la factura y la calidad del trabajo
Los hechos se remontan a octubre de 2023, cuando el fontanero acudió a la vivienda, ubicada en Vigo, para reparar un calentador. La mujer se mostró disconforme con el arreglo y, según explica la prensa local, “tras una discusión, telefoneó a su hija para que viniese a hablar con el fontanero”.
El desacuerdo, al parecer, tenía que ver con el pago de la factura y la calidad del trabajo realizado por el operador, que fue retenido durante unos 15 minutos en la vivienda al colocarse, la progenitora, delante de la puerta de salida para bloquearle el paso.
En ese tiempo, la hija llegó a casa “agresiva, desafiando, empujándolo”, y se enzarzó en una riña con el operario. Cuando éste intentó abrir la puerta para abandonar la vivienda, la hija, “en una reacción impulsiva”, usó un abrecartas que había cerca para intimidarlo, aunque luego recapacitaría y se apartaría para dejar salir al operario.
Ambas mujeres fueron denunciadas por el trabajador pero sólo la hija se enfrenta ahora a un posible delito leve por amenazas.
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