Los 'caganers' se euskaldunizan en Bilbao: "¿Por qué no uno del nuevo lehendakari?"

  • El jugador del Athletic Iñaki Williams, Olentzero, Mari Domingi o Imanol Pradales tendrán un hueco en las estanterías

  • Cada semana fabrican 2.500 figuritas y ya tienen más de 600 referencias

  • Los presos del Centro Penitenciario Puig de les Basses los realizan de forma artesanal

“¿Me habéis hecho cagando?”, preguntaban atónitos algunos personajes de fuera de Cataluña al verse representados en un ‘caganer’. Desconocían, en aquel momento, que entrar a formar parte de esta familia de figuritas de barro agachadas y haciendo sus necesidades fisiológicas al aire libre, aunque sea en esa atrevida postura, es todo un honor. “Hoy en día, todos quieren estar”, bromea Marc Alós, de la empresa Caganer.com. Hasta el momento, Leo Messi ha sido el 'caganer' más vendido de la historia.

Esta compañía gerundense con nombre del siglo XXI, pero espíritu de taller artesano, desembarca en Bilbao con una tienda dedicada a la venta en exclusiva de estas figuras. El local ocupa el número 25 de la calle Correo y aquí podrán encontrarse muchas de las más de 600 referencias con las que cuenta actualmente esta firma y otras nuevas. Estando en Euskadi, no pueden faltar los clásicos Olentzero y Mari Domingi, pero también otros personajes como el futbolista del Athletic Iñaki Williams y “¿Por qué no un ‘caganer’ del nuevo lehendakari?”, dice Alós.

La actualidad impera a la hora de decidir qué personaje se transformará en figurita de barro defecando y “va tan rápido” que ya esta familia ha dejado de reunirse, como hacía antaño, para escoger las cinco novedades que salían cada Navidad. “Ahora rondamos el medio centenar de nuevos ‘caganers’ anuales”, explica este escultor que se inspira en la actualidad para elegir los nuevos diseños, pero que cuenta con las ideas que le proponen clientes, la ayuda de sus propios hijos “que me dan ideas de personajes del mundo digital” y que recurre incluso a la Inteligencia Artificial: “Le pregunto y te sorprenderías con las ideas que me da y cómo funcionan”, dice entre risas.

Realizados en prisión

Una vez que se sabe la identidad de la nueva figurita, de la que saldrá una primera serie de entre 50 y 100 unidades, comienza el proceso de elaboración tras los muros del centro penitenciario Puig de les Basses, en Figueres. “Allí enviamos trailers con el barro” y con la ayuda de la formación impartida por empleados de Caganer.com, los presos realizan este trabajo remunerado.

Primero se parte de una escultura y se realiza un molde de yeso de dos caras, “lo rellenamos de barro” y “lo chafamos manualmente”. Una vez hecha la base, se deja secar la pieza durante un máximo de tres días en invierno y apenas 24 horas durante los meses más cálidos. Una vez seca, la pieza se pule “con cuchillo y esponja” y se hornea a 1.000 grados. Por último, se aplica la pintura plástica de forma manual. "A la semana estamos fabricando unos 2.500", añade.

Los políticos catalanes, Ronaldinho y Obama son algunos de los ‘caganers’ que más se han vendido. Aunque si hay uno que siempre triunfa, ese es Messi. Además, Alós nos desvela que las ventas de unos u otros políticos defecando han dado lugar al ‘caganómetro’, que "nos permite conocer la popularidad de los distintos candidatos" y su posible victoria en las urnas. “Por ejemplo, Biden lo vendemos poco en comparación con Trump”, puntualiza.

Mujeres 'caganers'

Lejos han quedado las reticencias de Ana María, la madre de Marc, que comenzó hace 30 años haciendo figuritas de barro del pesebre y que se resistía a poner cara a los ‘caganers’. Las elecciones catalanas de 2003 inspiraron a Marc para proponer a sus padres, hacer, entre otros, a Pasqual Maragall, tres años más tarde se internacionalizaron y llegaron Lula Da Silva, Nicolas Sarkozy o Evo Morales.

Además, en la última década las mujeres han empezado a formar parte de la colección de esta empresa que “antes solo hacíamos personajes masculinos porque el 'caganer' tradicional siempre ha sido un hombre”. Eso cambió, como tantas cosas, con el devenir de los tiempos, y ellas también tienen su versión en barro “y están teniendo muchísimo éxito”.

Cada vez son menos las celebridades que al verse de semejante guisa se sorprenden con un “¿Me habéis hecho cagando?”, y cada vez son menos los que limitan la compra de estas esculturas a la época navideña. No hay más que ver que los ‘caganer’ han llegado a Euskadi en pleno mes de mayo y lo hacen para quedarse.

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