Muere tras ser atacado con un destornillador en la cara en el mismo sitio en el que sufrió una paliza hace un año
La víctima fue, al parecer, descubierta intentado robar a un hombre que dormía en el parque de Doña Casilda
Al percatarse comenzó a perseguirle con un destornillador con el que le agredió al darle alcance
Hace un año la Ertzaintza le salvó la vida cuando ya estaba sin pulso tras otro intento de robo por el que fue apaleado
Y.S era un joven marroquí de solo 22 años. El pasado 20 de octubre falleció en el hospital de Basurto donde había ingresado en estado crítico cinco días antes, tras ser atacado con un destornillador en la cara en el céntrico parque bilbaíno de Doña Casilda.
Su agresor es un hombre que dormía en la calle y que, al parecer, le pilló robándole. Se da la circunstancia de que hace justo un año, el ahora fallecido pasó cinco días en coma tras recibir una paliza por parte de cinco chicos que le sorprendieron intentando robarles, en el mismo lugar.
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En aquella ocasión, según publica El Correo, la llamada de un testigo a la Ertzaintza para avisar de la paliza y que los agentes llevaran un desfibrilador en el coche patrulla evitaron que muriera, cuan ya estaba sin pulso. También entonces, dos de los sospechosos de propinarle aquella paliza fueron detenidos acusados de lesiones y omisión de socorro.
La historia se repite un año después
El pasado 15 de octubre, la suerte, que le había sonreído en 2022, se acabó para Y.S. cuando fue descubierto, presuntamente, intentando robar algo del bolsillo a un hombre que dormía en la pérgola de Doña Casilda. Al percatarse de que estaban intentando robarle, el hombre comenzó una persecución portando un destornillador con el que le agredió en la cara tras darle alcance.
Un testigo que presenció la brutal agresión llamó a la Policía que encontró a la víctima semiinconsciente y fue trasladado en estado grave al hospital de Basurto, donde falleció cinco días más tarde a causa de las heridas en su rostro.
El agresor de 48 años fue detenido y acusado de un delito de lesiones. Ahora, tras el fallecimiento de Y.S a causa de las lesiones provocadas con el destornillador, este hombre está imputado por un delito de homicidio.
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