No han tardado ni veinte minutos en desalojar la casa de Isabel. Los dos okupas, que se negaban a hacerlo, abandonaban la vivienda de Sestao este lunes.
La comitiva judicial se presentaba en el inmueble en torno a las 10 de la mañana acompañados de una patrulla de policía y los okupas no han puesto resistencia.
Los dos hombres han recogido sus pertenencias, se han metido en su coche y se han marchado del lugar, para alivio de Loli.
La mujer es prima de Isabel, la octogenaria propietaria de un piso de cuya venta depende que pueda seguir pagando la actual residencia donde vive en Palencia.
Tras recuperar su vivienda Loli se ha mostrado “satisfecha”.
“Ha sido mucho tiempo y ha sido muy duro. La espera ha afectado mucho a mi prima mentalmente. Al final todos han salido, pero, aun no entiendo que se puedan ocupar las casas y que todos los derechos los tengan los okupas y no los dueños” ha criticado.
Ha pasado más de un año desde que las dos mujeres iniciaran esta batalla para recuperar la casa.
Fue en marzo de 2022, acabado el contrato con los inquilinos de entonces, cuando decidieron ponerla a la venta.
Uno de ellos se negó a hacerlo, también a abonar la mensualidad del alquiler, generando una deuda de más de 9.000 euros.
Loli hizo pública la situación e incluso acampó durante 15 días frente a la vivienda de la calle Primero de Mayo de la localidad vizcaína. Protesta que tuvo que abandonar por consejo de su abogado.
Ayudar a su prima anciana a pagar la residencia, obligó a loli a vender su casa para satisfacer las mensualidades de más de 6.000 euros que debían al centro.
El compresivo comprador ha esperado hasta ahora para mudarse a la casa de Loli. La mujer, divorciada y con dos hijos, se quedará a vivir en la casa de la prima que tanto ha ayudado.