A la tercera, va la vencida. Las máquinas han comenzado a derribar la Nagusien Etxea de Romo, todo un símbolo de la resistencia social de un barrio. Los operarios han llegado pasadas las 06.00 horas y trabajan desde ese momento rodeados de un fuerte dispositivo policial. De hecho se han producido algunos momentos de tensión entre la Ertzaintza y algunos vecinos que se han saltado el perímetro de seguridad para protestar por este derribo.
El edificio que alberga un centro de jubilados y el euskaltegi, ubicado en la calle Lope de Vega, había logrado salvarse del derribo en mayo de 2020. Este pasado verano decenas de efectivos de la Brigada Móvil de la Ertzaintza y de la Policía Municipal de Getxo “tomaban por la fuerza” la Nagusien Etxea, tal y como denunciaba en NIUS Paco Blanco, uno de sus usuarios. Sin embargo, horas después de desalojar y acordonar el edificio, un juez paralizaba como medida cautelar el derribo del antiguo gaztetxe. Era la segunda ocasión en la que se libraba del derribo.
Tras una década de lucha vecinal para evitar lo que ahora ya es inevitable, Rafa Martín se lamenta de que se haya hecho “a pesar de estar a la espera de un recurso de casación del Tribunal Supremo”. A este vecino y usuario de la Nagusien Etxea, convertido en portavoz, le cuesta no emocionarse al recordar los 35 años que han pasado en este lugar.
Él y otros muchos vecinos se resisten a resignarse y se han concentrado para protestar por el derribo. Durante estas primeras horas, ya se han producido algunos altercados entre los agentes de la Ertzaintza y algunos de los manifestantes que se han saltado el precinto. Además, esta tarde a las 19.00 horas está convocada una concentración de protesta.
El solar se utilizará para construir un centro intergeneracional en el que convivirán 140 personas jóvenes y mayores. El plan de la Diputación y el Ayuntamiento es levantar un centro con un centenar de camas para mayores con dependencia y 40 apartamentos dotacionales para jóvenes en régimen de alquiler social. En la planta baja, se reservarán 283 metros cuadrados para un local donde se reubicará esta asociación de personas mayores de Romo.