Si Bruce Willis (67 años), hubiese elegido alguna vez no salir de casa nunca más, Pablo Perillo (54 años) podría haber vivido por él sin que nadie se hubiese percatado del error. Su parecido físico es asombroso. En la forma de su cabeza, la alopecia, su barba canosa, la complexión física, la mirada y su icónica sonrisa. Incluso cuando la transforma en gesto adusto siguen siendo casi iguales. Además, Bruce ha envejecido sin operaciones de cirugía que le cambien el rostro y se ha mantenido siempre en excelente forma, lo que ha favorecido que a pesar de los 13 años que le separan del actor la similitud siga intacta.

Contactamos con él para que nos cuente cómo es eso de caminar por la vida sintiéndose una de las estrellas más rutilantes que ha tenido Hollywood. Es argentino y dice que, desde muy pequeño le gustó el mundo de la interpretación. "Aprendí el oficio en teatros independientes y sabía que este era el camino que quería tomar, pero jamás se me habría ocurrido la idea de trabajar de doble. Como actor deseas tu propio camino y ni siquiera que pudiese guardar parecido con un actor. Fue hacia los 20 años, en la discoteca Paladium, cuando una joven me dijo que tenía los mismos rasgos que el protagonista masculino de 'Luz de luna', la serie de televisión que triunfaba en los ochenta". La chica le insistió y, tan convencida estaba, que pensó que Pablo trataba de imitar al actor. A medida que Bruce ganaba popularidad, más crecía la confusión y no dejaba de sentirse observado. No le daba demasiada importancia y siguió ganándose la vida como actor de teatro alternativo, relaciones públicas y otros trabajos comerciales.

A principios de 2000, su gente le animó para que se inscribiera en un concurso organizado por el canal de televisión argentino TNT Sports basado en parecidos con estrellas de Hollywood. Lógicamente, resultó ganador. "El premio era una invitación a la entrega de los premios SAG Awards, una de las citas más importantes de la industria del cine estadounidense, y todo estaba preparado para lo viviese como una auténtica celebrity". Le trasladaban en limusina y caminó por la alfombra roja como una estrella más. Ahí jugó a ser el verdadero Bruce Willis y supo realmente lo que era ponerse en su piel y encontrarse cara a cara con Denzel Washington, Kiefer Sutherland o Rob Lowe. La gente le gritaba ¡Bruce, Bruce! y algunos actores llegaron a pensar que de verdad era él. "Me crucé con Matthew Perry y me confundió, a pesar de que son grandes amigos y haber protagonizado juntos 'Falsas apariencias' (1999)".

Todo aquello le resultaba extraño, por inusual y por ser un mundo que siempre vislumbró muy lejano, pero al mismo tiempo reconoce que fue "muy lindo". Le sirvió para entender que llamaba la atención y para ver que la cosa iba en serio, sobre todo cuando le salieron los primeros contratos como doble con marcas comerciales, eventos y producciones audiovisuales. "Nunca me habría imaginado trabajar de doble y fue complicado decidirme, pero era tal la similitud que no tuve otra opción".

En 2017 le llamaron de su productora porque Bruce se encontraba en Nueva York con otros compromisos laborales y debía suplirle para hacer el marketing de una famosa bebida en Budapest. Tres años después, contactaron con él para participar en cinco películas, pero irrumpió la pandemia y todo aquello se truncó porque ni siquiera se le permitió salir de su país al no estar autorizadas mundialmente las vacunas argentinas.

Pero el peor mazazo estaba por llegar. En marzo la familia de Bruce anunció su retirada de la actuación debido a que padece afasia, una enfermedad que afecta a sus habilidades cognitivas. Esto ha supuesto que, a sus 67 años, haya visto suspendidos sus proyectos en Estados Unidos y Canadá. También para Pablo, a quien la noticia le cayó como "un baldazo de agua fría", tanto por la preocupación que le hace sentir su salud como por lo que pudiese afectar a su profesión de manera directa.

Una vez superado el primer impacto, Pablo asegura que seguirá trabajando y cuidando la imagen del actor. Lógicamente, las producciones cinematográficas se han paralizado, pero él mantiene muchos compromisos y está arrasando en las redes sociales. Acumula 630.000 seguidores en Instagram y más de cuatro millones en Tik Tok. La cantante Dua Lipa llegó a creer que era realmente Bruce cuando le vio en uno de sus vídeos.

Dicen que es una de las personas con mayor parecido a una estrella de Hollywood. Lo que es seguro es que difícilmente Bruce Willis habría podido encontrar un doble tan igual a él. Antes de despedirnos, le preguntamos a Pablo si hay algo de impostado. Nos garantiza que todo es natural y asegura que era así antes incluso de caer en la cuenta de su parecido con el actor.

Reconoce que le costó acostumbrarse a ser confundido por un actor tan célebre. Al principio se ponía nervioso, le provocaba cierta incomodidad. "Después de 35 años consciente del parecido, me he acostumbrado. Es algo que genera mucho ruido, tanto cuando trabajo como cuando paseo. Me confunden en todas partes e insisten en ello incluso viendo que hablo español, pero es gracioso y me divierto con esa sensación". Su mayor deseo ahora es que se recupere y poder decirle algún día en persona lo mucho que le admira.