El rey Felipe VI ha recibido en la base de Torrejón de Ardoz (Madrid) a los últimos 24 militares destacados en Afganistán, en un acto en el que la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha pedido "perdón" si algún familiar de los 102 españoles muertos en la misión "no se ha sentido suficientemente apoyado".
Veinte años después de iniciarla, España cierra hoy su misión en Afganistán con el regreso de los últimos 24 militares que permanecían en el país asiático. Un regreso que ha dejado estas emotivas imágenes, las de un hijo recorriendo la pista del aeropuerto para abrazarse con su padre. Las lágrimas del reencuentro con la familia. Unos momentos que ha presenciado el rey Felipe VI que les ha recibido a pie de pista a su llegada a la base de Torrejón.
Ha sido la misión de nuestro Ejército en el exterior más larga, y también la que más vidas ha costado.
Los primeros militares españoles llegaron a Kabul cuatro meses después del 11-S para hacer frente a los talibanes y Al Qaeda. Desde entonces 27 mil soldados han patrullado los escarpados terrenos del país asiático en una misión que durante añosse calificó de humanitaria.
La realidad es que nuestras tropas entraron en combate muchas más veces de las conocidas y que allí se escribieron algunas de sus mayores hazañas bélicas, que han llegado incluso a la gran pantalla.
Ha sido la misión más exigente. Se ha cobrado más de cien muertos, 62 en el accidente del Yak-42, al que siguió una larga polémica por el fraude en las identificaciones. Otros 17 en un accidente de helicóptero. Muchos otros, por la explosión de una bomba.
3.500 millones de euros ha invertido España hasta que los últimos 24 han arriado su última bandera en Kabul. También se retiran sus aliados, pero allí se quedan los problemas que fueron a combatir.