Primero fue el no de Bélgica con Puigdemont. Luego el presidente en funciones deja a los pies de los caballos a la fiscalía dando munición al fugado y ahora un nuevo varapalo a España y su justicia que se lo debe hacer mirar. Las autoridades de Reino Unido han contestado este miércoles a la orden de detención europea dictada por el juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, sobre la ex consejera de Educación catalana Clara Ponsatí que la petición "es desproporcionada" con arreglo a su legislación, por lo que no le darán trámite, según un documento recibido por la Unidad Oficina Sirene (cooperación policial europea) dependiente del Ministerio del Interior.
Llarena, que instruye la causa por el 'procés' emitió este martes una nueva orden europea de detención y entrega contra Ponsatí, fugada a Escocia, por un delito de sedición tras descartar el de malversación a la luz de la sentencia dictada por la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, según la cual, la cesión de espacios para la celebración del referéndum ilegal que se le imputa a ella no entraría en ese tipo delictivo.
"La orden de detención europea ha sido revisada por un abogado especializado del Reino Unido en nombre de la Agencia Nacional contra la Delincuencia. Han determinado que es desproporcionado con arreglo a la legislación del Reino Unido", contestan ahora las autoridades británicas al Ministerio del Interior español mediante ese sistema de cooperación policial entre países.
De este modo, las autoridades de Reino Unido indican a España que la orden de detención europea "no ha sido certificada por el Servicio Nacional SIRENE del Reino Unido y, por el momento "no tomarán ninguna otra medida en relación con este asunto".
Emplazan no obstante a España a hacer llegar "información sobre el historial delictivo previo" de Ponsatí "o cualquier otra información relativa a la gravedad de la infracción" que tenga en su poder. En ese caso, volverán a "evaluar la decisión de no certificar esta orden de detención europea".
Según fuentes jurídicas consultadas por Europa Press, el problema reside en que la sedición en la legislación de Reino Unido es una cuestión de orden público y no un delito contra el Estado, como se entiende en España, de ahí que consideren una desproporción entregar a la consejera.
Otras fuentes señalan que no obstante, además de a las autoridades policiales o del Ministerio del Interior de Reino Unido, se cursó la petición de entrega a la autoridad judicial de Escocia, a la que además se ha enviado este miércoles la orden europea de entrega traducida al Inglés.
Por ahora, apuntan estas fuentes, la respuesta sólo se refiere al sistema Sirene de cooperación policial entre países, por lo que habrá que esperar a que se pronuncie el sistema judicial escocés.
Precisamente, Ponsatí había anunciado su intención de comparecer ante la justicia escocesa este jueves, pero su defensa este miércoles ha dicho que pospondrá la entrega. En un comunicado, su abogado Aamer Anwar ha asegurado que este miércoles por la mañana les llegó la euroorden de arresto traducida y que las autoridades del Reino Unido han pedido aclaraciones sobre la solicitud de extradición a España.
Anwar ha considerado que la euroorden emitida por el juez del Tribunal Supremo (TS) Pablo Llarena contiene "contradicciones" y que se refiere a los delitos de rebelión y sedición, aunque Ponsatí solo es acusada de sedición, y sin clarificar su rol en los hechos.