El alto tribunal responde a las peticiones de sus defensas, que alegaron que su permanencia en prisión vulnera sus derechos fundamentales a la defensa y a un proceso justo y también se estaba viendo afectado su entorno familiar y personal.
El Supremo responde que el hecho de que continúen en prisión no afecta a ninguno de estos derechos y que "la dignidad de los procesados, las condiciones de su alimentación y la habitabilidad del lugar de su custodia" están siendo debidamente garantizados.
Torra no ha tardado en criticar esta decisión del Supremo: "Es un dato tristísimo. Es una indecencia. Cada día que pasa es una indecencia".
En su réplica a la oposición en el Debate de Política General del Parlament, ha argumentado que su permanencia en la cárcel afectará a su derecho de defensa porque no les permitirá preparar el juicio como es debido. Torra ha concluido que su permanencia en la cárcel evidencia que no tendrán un juicio justo, y ha avisado de que lo criticarán desde ahora mismo: "Iremos al juicio a acusar a este Estado de todo".
Precisamente este martes, el presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, dijo que el independentismo "no podrá garantizar ningún tipo de estabilidad" en el Congreso de los Diputados al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, si antes de noviembre hace una propuesta de referéndum de autodeterminación. Torra también vinculó su apoyo a Sánchez en Moncloa a que los políticos presos salgan de la cárcel.
A este ultimátum de Torra, el Gobierno central no tardó en contestar. La ministra portavoz, Isabel Celaá, dijo el president de la Generalitat no debía esperar al mes de noviembre: la respuesta es "autogobierno y no independencia". El Ejecutivo dijo que no acepta ultimátums y que lo que hace falta en Cataluña es más responsabilidad y menos órdagos.