Sanidad amplia el uso de la vacuna de Janssen a las personas entre 50 y 59 años

  • Sanidad vacunará con Janssen al grupo de 50 a 59 años y colectivos difíciles de vacunar

  • Estudian también si abrir la puerta a la vacuna para las embarazadas

  • Esperan a la EMA para decidir si vacunar a menores en condiciones de alto riesgo o dependencia

El Ministerio de Sanidad introduce nuevas modificaciones en la estrategia de vacunación. Concretamente, la Comisión de Salud Pública ha aprobado ampliar el uso de la vacuna de Janssen a las personas de 50 a 59 años, así como a colectivos vulnerables difíciles de captar como personas sin hogar, temporeros o inmigrantes en situación administrativa irregular, al igual que personas con discapacidad, autismo y enfermedades mentales severas; una decisión que contribuiría a acelerar significativamente la inmunización de estos grupos, habida cuenta de las características del suero de Johnson & Johnson, que es monodosis.

Además, la Comisión de Salud Pública, en la cual participan miembros del Ministerio de Sanidad y representantes de las comunidades autónomas, ha analizado y valorado la posibilidad de abrir la puerta por primera vez a la inmunización de embarazadas; una cuestión en estudio.

Janssen, para mayores de 50 y colectivos difíciles de vacunar

Hasta este momento, la vacuna de Janssen, --cuya llegada a Europa fue puntualmente paralizada para, al igual que sucedió con AstraZeneca, analizar su relación con extraños eventos trombóticos aparecidos en pacientes tras su administración, lo cual la Agencia del Medicamento Europeo calificó también como "posible efecto secundario", pese a incidir en que los beneficios son "mucho mayores que los riesgos"--, en España fue destinada inicialmente a los grupos de 70 a 79 años. Posteriormente, decidió emplearse para completar la vacuanción en mayores de 60 años.

Ahora, después de las personas de 60 y más años se continuará utilizando esta vacuna en las personas mayores de 50, así como en los mayores de 18 años que pertenezcan a un colectivo vulnerable, sean pacientes difíciles de vacunar o de captar para la vacunación y cooperantes que se desplacen en misión a países de alto riesgo, o personas que por su actividad no vayan a estar en España cuando les toque recibir la segunda dosis.

"Puesto que esta vacuna solo requiere una dosis tiene importantes ventajas para su utilización desde el punto de vista de factibilidad y eficiencia de los recursos sanitarios en ciertos colectivos difíciles de captar y vacunar, bien por tratarse de aquellos que no acuden al sistema sanitario (personas sin hogar), por la necesidad de necesitar el desplazamiento de personal a los domicilios particulares, o bien por tratarse de colectivos que difícilmente pueden acudir en el tiempo establecido para completar su pauta (ciertas actividades laborales, como trabajadores del mar)", recogía el documento sobre el que han debatido hoy.

Abiertos a su uso en embarazadas

Por otra parte, tras analizar la situación y observar que no se ha detectado un mayor riesgo de COVID-19 grave por estar embarazada, más allá de las condiciones de riesgo que presente la mujer, en el documento evaluado en la Comisión de Salud Pública contempla la posibilidad de vacunar a las embarazadas o en periodo de lactancia con vacunas de ARNm cuando les corresponda según el grupo de priorización al que pertenezcan, es decir, con Pfizer o Moderna.

Uso de las vacunas en menores en condiciones de alto riresgo o dependencia

Más allá, en el nuevo cambio de la estrategia de vacunación Sanidad contempla también que, siempre que la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) dé el visto bueno, se empiece a administrar la vacuna de Pfizer a los adolescentes de entre 12 y 15 años con condiciones de "muy alto riesgo", en situación de "gran dependencia" y aquellos que estén en centros especializados de discapacidad intelectual, tutelados o de educación especial. "El resto de adolescentes no se priorizarán de momento", enfatiza el texto.