Fracaso. Lamentable. Inaceptable. Incapaces. Así se ha calificado, por los propios politícos el camino hacia una nueva investidura fallida y otras elecciones. Que además nos va a costar millones de euros. La última sesión de control se ha convertido en todo un vodevil. Sánchez contra todos y todos contra Sánchez. La campaña electoral ha comenzado aunque la verdad es que nunca terminó.
"Espero que los españoles den una mayoría más clara al PSOE para que ustedes, señor Casado, Rivera e Iglesias no tengan la capacidad de bloquear la formación de un Gobierno", le ha respondido Pedro Sánchez, presidente del Gobierno en funciones, en su última sesión de control al Gobierno, en línea con lo que dijo anoche en rueda de prensa. Anoche ya acusó a las otras tres formaciones de impedir la formación de Gobierno. "Cuando están en la oposición no reconocen la legitimidad del PSOE", le ha espetado Sánchez al líder del PP.
Sánchez también ha aprovechado esta sesión de control, ya con la mirada puesta en la campaña, para marcar distancias con ERC. Ha advertido de que los socialistas aplicarán los artículos de la Constitución que sean necesarios, lo que incluye el 155, ante "ante cualquier intento" de la Generalitat de "violentar" de nuevo la Carta Magna o el Estatuto de Cataluña. Previamente Rufían ha lamentado que el PSOE vuelva a ser el partido "del 155".
El líder del PP, Pablo Casado, ha denunciado la "incapacidad" del jefe del Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez, para poder llegar a acuerdos y ser investido, y le ha advertido de que las elecciones "las carga el diablo". En su réplica en la última sesión de control del Congreso, el secretario general del PSOE le ha afeado su falta de sentido de Estado por no permitir su investidura y ha pedido una mayoría "más rotunda" para el PSOE el 10 de noviembre para evitar el bloqueo político de nuevo.
Casado ha criticado a Sánchez que "para este viaje no hacían falta tantas alforjas" porque lleva queriendo ir a las urnas "desde el principio". "Quién no es capaz de gestionar su investidura, difícilmente pueden gestionar una nación como España", ha afirmado, para denunciar que Sánchez pretenda ser investido por "agotamiento electoral", algo que supone una "grave irresponsabilidad".
El Gobierno en funciones ha insistido este miércoles en responsabilizar a la oposición y especialmente a Unidas Podemos de la repetición electoral, llegando incluso a cuestionar que la renuncia de su líder, Pablo Iglesias, a estar en el Ejecutivo de coalición que demandaba al PSOE fuera un paso "real".
En los pasillos del Congreso, la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, ha señalado que el paso atrás que "dijo" haber dado Iglesias para facilitar un acuerdo "nunca fue real" porque al final no facilitó que el "equipo negociador tuviera un ámbito de negociación que permitiera llegar a un acuerdo". "Desde que supo que no estaba dentro del gobierno no facilitó que el Gobierno se pudiera constituir", ha asegurado.
Minutos antes, dentro del hemiciclo la vicepresidenta Carmen Calvo también había señalado que desde Unidas Podemos han tenido un problema durante los meses transcurridos desde las elecciones de abril y es que Pablo Iglesias "o estaba en el Gobierno o se rompía la baraja". "Bastó un solo segundo para que su líder dijera que no a un Gobierno de coalición", le ha espetado Calvo a la portavoz adjunta de Unidas Podemos, Ione Belara, después de que esta recordar la renuncia de su líder.
Preguntada por el enfado con el que los ciudadanos han recibido la nueva convocatoria electoral, Montero ha admitido que los partidos tienen que "tomar nota" de ese "cabreo", pero se ha afanado en exculpar al PSOE de la situación cargando la responsabilidad en la oposición.
De hecho, la única "autocrítica" que ha hecho sobre la actuación de su partido es que han sido "incapaces" de conseguir que Unidas Podemos "se sentara a hablar de programa en primer lugar" para entrar después es cómo debía estructurarse el Gobierno. "No hemos tenido capacidad de convencerles de que era esa era la fórmula", se ha lamentado.
Preguntada si la repetición de los comicios puede llevar a la misma situación, Montero se ha mostrado convencida de que la ciudadanía, que es "muy inteligente", "tomará nota de lo que ha ocurrido". "El PSOE recibió el encargo y el resto de formaciones ha impedido formar gobierno; por ahí hay que insistir pedagógicamente en este periodo", ha reconocido, augurando que "habrá un mandato claro" para que se haya nuevo gobierno lo antes posible. Respecto a la necesidad de reformar la Constitución para evitar situaciones de bloqueo como la actual, Montero se ha mostrado partidaria de tomar medidas para evitar que algunas "minorías" se crean con "capacidad de imponer vetos o chantajes".
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha criticado que el presidente del Gobierno en funciones y líder del PSOE, Pedro Sánchez, "culpe" a los votantes de que no se haya podido alcanzar un acuerdo para la investidura, y ha prometido que, tras las elecciones generales de noviembre, Cs buscará pactar un gobierno con el PP. Sánchez está "nervioso" y "ha intentado culpar a los españoles" diciéndoles que "votan mal" y a los grupos parlamentarios que "no le entregan sus escaños", ha declarado Rivera en rueda de prensa en el Congreso, lamentando que el dirigente socialista evite hacer "autocrítica".
A su juicio, Sánchez ha sido un "escollo" y se ha convertido en "un problema para España". Por eso, ha asegurado que si de los comicios de noviembre surge una mayoría que permita echarlo de la Moncloa, llamará al líder del PP, Pablo Casado, para negociar y formar gobierno "en un mes".