En los trenes, es necesario un justificante de desplazamiento - y el movimiento es casi nulo en Atocha-, en Barajas deben acreditar el motivo, sin justificante, sanción. Todos deberán cruzar un control, un justificante médico, de trabajo o que regresan a su domicilio habitual. SI no lo hacen se quedarán en tierra y podrán ser multados con 600 euros. En las carreteras los controles llegan este jueves para evitar que la gente huya a las costas. Sí, los ciudadanos de otros países llegan a España, sobretodo a Madrid, pero los españoles no pueden salir en Semana Santa. El puente de San José va a ser una prueba de fuego para ver si realmente nos tomamos en serio el riesgo de una cuarta ola. Todo, para evitar el aumento de casos de coronavirus.
Es por eso que hoy se ha amanecido bajo nuevas restricciones aquellas comunidades que celebran el puente de San José. Son sobre todo cierres perimetrales, cambio en el toque de queda y limitaciones en el número de personas que pueden reunirse. Muchos territorios alargarán esas medidas hasta después de semana santa.
Las restricciones fueron acordadas por el Consejo Interterritorial para este puente de San José. En todas la comunidades en las que es festivo este viernes se impondrá el cierre perimetral hasta el 21 de marzo. Aunque prácticamente todos los territorios de España ya permanecían cerrados. Madrid acatará el cierre perimetral aunque lo haya recurrido en los tribunales.
Algunas comunidades, como el caso de Extremadura, lo han extendido hasta el 9 de abril, coincidiendo con Semana Santa.
Otra de las medidas acordadas es imponer el toque de queda a las 11 de la noche y hasta las 6 de la mañana. No obstante, las comunidades que así lo han querido pueden establecerlo a las 10 de la noche.
En el interior de los locales, solo están permitidas reuniones de cuatro personas como máximo y de seis, si estas se producen en el exterior. Hay que recordar que estos son los límites máximos y que dependiendo de la comunidad pueden ser más restrictivos.
El Gobierno andaluz ha decidido este miércoles mantener el cierre de la movilidad entre provincias tres semanas más, con lo que se incluyen la Semana Santa, y retrasar el inicio del toque de queda a las 23,00 horas, y a las 22,30 horas el cierre de los negocios de hostelería y comerciales.
Se plantea así un puente sin movilidad, ni turismo nacional. Aunque si internacional. Desde que Alemania ha permitido a sus ciudadanos venir a Mallorca, los vuelos se han llenado y las compañías aéreas no han dejado de aumentar sus plazas por miles.
Todo ello, cuando los expertos no dejan de prevenirnos de la cuarta ola y de exigirnos que cumplamos con las restricciones y medidas de distanciamiento social.