Podemos ha realizado una contraoferta, que el PSOE ha rechazado en minutos, a escasas horas de la votación en el Congreso de la segunda votación para la investidura de Pedro Sánchez en la que necesitaría más síes que noes. ERC y Bildu se han posicionado ya en la abstención para presionar a las izquierdas de España, "que deberían tomar ejemplo de Cataluña", en palabras de sus portavoces. La contraoferta de Podemos incluía Vicepresidencia de Derechos Sociales e Igualdad, competencias en Igualdad, un Ministerio de Sanidad y Consumo y el de Trabajo. Esta petición que se ha mantenido constante en todas las negociaciones entre Podemos y PSOE es el gran escollo para llegar a un acuerdo.
Podemos ha prometido siempre derogar la reforma laboral, algo que Sánchez no puede vender en Europa, donde ha vendido moderación en las medidas económicas de su gobierno y control de cuentas. La reforma laboral de Rajoy es la medida más aplaudida de Bruselas que siempre ha apostado por profundizar en ella para flexibilizar el mercado de trabajo. Es justo lo contrario de lo que opina y Podemos y de lo que señalaba Sánchez en su día. Ahora promete limar los aspectos más lesivos pero con Podemos en el Ministerio sería imposible vender una no derogación.
Los de Pablo Iglesias reclaman para sí el Ministerio de Trabajo con competencias para subir el SMI y derogar la reforma laboral del PP, aunque renuncian a la parte relativa a las pensiones que sí han reclamado en propuestas anteriores.
Otros de los ministerios de los que aceptan prescindir son los de Transición Ecológica y Vivienda. Sin embargo, mantienen su petición de hacerse cargo del Ministerio de Sanidad y Consumo con competencias para "asegurar una sanidad universal real y frenar las privatizaciones del sistema sanitario", así como garantizar el derecho a la eutanasia.
Por último, también exigen el Ministerio de Ciencia y Universidades para aumentar la financiación en ciencia e innovación al 2 por ciento del PIB a lo largo de la legislatura, articular una carrera investigadora "digna" y converger en la ratio de investigadores por habitante con la media europea. Además, abogan por bajar las tasas universitarias y aumentar las becas. Pero la reforma laboral de Rajoy parece a día de hoy intocable. Europa vigila. Algo que Sánchez sabe y Podemos