Hombre, de 64 años, con factores de riesgo como hipertensión arterial, obesidad o diabetes y necesitado de ventilación mecánica: es el perfil del paciente que ha necesitado durante la primera ola de covid de cuidados intensivos en nuestro país, unidades en las que han permanecido una media de 14 días.
Así se desprende del Registro COVID-19 de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (Semicyuc), gracias al cual se han dibujado los tres perfiles de enfermos críticos que han sido ingresados en las ucis entre marzo y mayo pasados.
Del estudio, en el que se han analizado 2.022 pacientes de 76 hospitales de todo el país y que ha sido ya publicado en el "Critical Care Journal", se desprende que el perfil más común es el de una persona joven con una media de edad de 64 años y principalmente varón (en el 70 % de los casos).
Siete de cada diez tenía factores de riesgo como hipertensión arterial (46 %), obesidad (35 %) y diabetes mellitus (20 %); el 76 % requirió ventilación mecánica y permaneció entre 8 y 27 días en la UCI, es decir, una media de 14 días.
Mientras, la mortalidad global observada asciende al 32 % (que sube al 37 % en los pacientes que necesitaron ventilación mecánica frente al 17 % de los que no la requirieron).
La investigación, en la que han participado más de 300 intensivistas, agrupa en tres fenotipos los enfermos críticos con diferencias no solo clínicas, sino también por su estado de inflamación y por la evolución final.
Así, el primero de ellos se corresponde con críticos menores de 65 años, con escasa inflamación y poco desarrollo de complicaciones, con una mortalidad del 20 %; el cuadro más leve se dio en el 27 % de los casos.
El fenotipo B representa a pacientes con un nivel medio de gravedad e incluye a menores de 65 años, pero con mayor estado de inflamación y desarrollo de "shock", lo cual condiciona una mortalidad del 25 %.
Por último, el fenotipo C, el más frecuente, afectó a más del 40 % de los pacientes: este grupo representa a los enfermos más graves, con una mortalidad del 40 % y está conformado por mayores de 65 años, con antecedentes de enfermedad hematológica y con un mayor riesgo de desarrollar complicaciones graves como el "shock o la insuficiencia renal aguda por su mayor estado inflamatorio.