Alta tensión con los menas en Cataluña. La mayoría de los menores extranjeros no acompañados (MENAs) acogidos en el Estado español son varones; su promedio de edad es de quince años y medio aunque aumentan los que están en la franja de 13 a 14 años; la mayoría son de las zonas del Magreb y el Sahel y alrededor del 70% proceden de familias numerosas de escasos recursos.

Son vulnerables y ya no tienen nada que perder, a pesar de su edad, lo que les convierte en un cóctel explosivo. Las razones que llevan a estos jóvenes a dejar sus países de origen son la falta de expectativas (59,9%), situaciones de pobreza (54,7%) y razones laborales (51%), según un estudio elaborado por el Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia para Metrópoli Abierta.

No solo eso. La llegada de menas no para de crecer en Cataluña. Según el informe elaborado por el Sindic titulado ‘La situación de los menores migrantes sin referentes familiares en Cataluña’ . Algunos datos del mismo son demoledores. En relación con el año 2015, el número de atendidos en 2017 se multiplicó por cuatro, de 377 nuevos casos atendidos en el sistema de protección a 1.489, con un crecimiento del 295%. Entre los meses de agosto de 2015 y de 2018, el número mensual de nuevos casos se multiplicaba por 14. Solo en 2018 se atendieron a 3.450. En abril de 2019, la cifra había subido hasta los 4.077. El aumento ha obligado al Gobierno autonómico a crear con carácter de urgencia 158 centros con 2.556 plazas residenciales.

Mientras en el año 2015 estos niños representaban cerca del 4% del conjunto de los niños tutelados por la Administración, con 289, en fecha 15 de septiembre de 2018 este porcentaje se ha incrementado hasta el 27,7%, con 2.359, un 431% más. Este hecho también ha provocado que el número de niños atendidos por el sistema de protección se haya incrementado un 23% en el período 2015- 2018. A lo largo de los últimos años, el Síndic ha denunciado la sobreocupación de estos centros de acogimiento, en muchos casos de un 20%.

Planificar a corto y medio plazo la creación de plazas en condiciones adecuadas de calidad necesarias para atender la llegada de niños migrantes sin referentes familiares y supervisar los proyectos educativos y las condiciones de los centros de nueva creación, con el fin de que tengan las garantías adecuadas, son solo algunos de los conseios que destaca el informe para solventar las situación.

La memoria de los órganos judiciales de Barcelona destaca que es un colectivo muy vulnerable y reclaman un "esfuerzo adicional" a las Administraciones para que aporten soluciones, según la última memoria de los órganos judiciales de la capital catalana. La “ausencia de familiares o estructura en territorio”, el abuso de sustancias tóxicas, la falta de recursos económicos, la falta de vinculación a procesos formativos, laborales o de capacitación o la carencia de documentación, son algunas de las características de los menas.

En los últimos años se ha producido un incremento en el número de jóvenes de entre 14 a 18 años internados en estos recintos por la comisión de un delito, la mayoría de veces robos con violencia e intimidación. La caída de años anteriores se rompió a partir del 2016. Fuentes de la Generalitat consideran que este incremento se debe a la llegada de los ‘menas’ que viven en la calle. En noviembre del 2018, se calculaba que un tercio de los internados era menores inmigrantes.

En relación a la noticia que destacaba que a los Menas se les iba a pagar 664 euros al mes en ayuda si tenían menos de 23 años se ha especificado ya que no se trata solo Menas pero sí que les afectarña de forma positiva. Hablamos de una prestación social que no se concederá en exclusiva a los menas que alcancen la mayoría de edad en Cataluña, sino que está destinada a todos los jóvenes extutelados, con independencia de su origen.

Las prestaciones sociales para extutelados se conceden en Cataluña desde 2007 y van destinadas a jóvenes de hasta 21 años. La novedad que introduce el cambio legal aprobado es que estos jóvenes podrán cobrar la paga durante dos años más, hasta los 23 y se rebajan las condiciones para acceder a las mismas.

La nueva normativa será especialmente beneficiosa para los menores extranjeros, ya que muchos llegan a España a partir de los 16 ó 17 años y, por tanto, han estado tutelados menos de tres años. Pero la ampliación de las ayudas también mejorará la situación de jóvenes sin recursos de cualquier nacionalidad que hasta ahora solo podían cobrar la paga hasta los 21 años, sin poder acceder a la Renta Garantizada de Ciudadanía, que se reserva a los mayores de 23.