El PSOE ha alcanzado un pacto con ERC para que el próximo miércoles se abstengan en el Congreso de los Diputados y se prorrogue por sexta vez el estado de alarma, según informa 'La Vanguardia'.
El consenso entre socialistas y ERC llega después de que estos últimos votasen en contra en la quinta prórroga. Entonces, el PSOE logró sacar adelante el estado de alarma, no sin polémica tras un pacto con Bildu.
Así, el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha querido asegurar esta vez, al menos, la abstención de ERC, que habría logrado tras reuniones discretas con el vicepresidente del Ejecutivo catalán, Pere Aragonès, en las que no han participado ni la vicepresidenta Carmen Calvo ni la portavoz socialista en la Cámara baja, Adriana Lastra.
Con este pacto, a cambio de la abstención de ERC, el Gobierno, al igual que ya hiciese con el PNV para el Gobierno vasco, cede la gestión del Ingreso Mínimo Vital y del fondo de reconstrucción europeo a la Generalitat.
A la vista de estas conversaciones, el partido "ha decidido reunir de urgencia la Permanente Nacional" el sábado por la tarde, han explicado fuentes republicanas.
Cabe recordar que ERC votó en contra de la prórroga en la última votación y criticó que el Gobierno cerrara un pacto con Cs para sacarla adelante en vez de dar respuesta a sus peticiones, que incluían el retorno de las competencias centralizadas con la alarma y un calendario para la mesa de diálogo.
Por su parte, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha avisado de que se volverá a oponer a la prórroga del estado de alarma si no se retornan a la administración catalana las competencias que están actualmente bajo el mando del Gobierno central.
En declaraciones a los periodistas tras visitar las obras del despliegue de la fibra óptica entre Súria y Solsona, Torra ha dicho que "es evidente que el Govern reclama recursos y todas sus competencias".
Y, por ello, ha sentenciado que la Generalitat "se opondrá, naturalmente, a cualquier prórroga del estado de alarma que no retorne nuestras competencias".
Torra ha reclamado también "los 4.000 millones de euros que Cataluña necesita", que se amplíe el objetivo de déficit hasta alcanzar el 0,2 % y que se permita a las administraciones locales hacer uso de su superávit.