El exdirector de la Seguridad del Estado Francisco Laína, que ejerció como presidente del Gobierno en funciones tras el asalto al Congreso del golpista Antonio Tejero evitando que hubiera un vacío de poder, falleció ayer en Ávila a los 85 años.
Laína era el director de Seguridad del Estado durante el 23-F, con rango de secretario de Estado, y durante catorce horas actuó como jefe de la comisión permanente de secretarios de Estado y subsecretarios, es decir un gobierno que asumió las funciones del Ejecutivo en aquellos momentos.
En la noche del 23-F leyó una declaración en la que llamó a la tranquilidad de la ciudadanía ante el golpe militar y su intervención hizo posible que no se produjera un vacío de poder.
Fue, además, uno de los principales impulsores de la Escuela Nacional de Policía de Ávila.
Nacido en La Carrera (Ávila) en 1936, Francisco Laína García estudió Derecho y entró en el Cuerpo Técnico de la Administración Civil del Estado.
En la administración desempeñó, entre otros, los puestos de delegado del Gobierno en la isla de La Palma, jefe insular del Movimiento en la misma isla, subdirector general de Política Interior, gobernador civil de León, Las Palmas y Zaragoza. En junio de 1980 cesó en dicho cargo, al ser nombrado director de la Seguridad del Estado.
Después del golpe de Estado de 1981 sustituyó durante unos meses al ministro del Interior Juan José Rosón cuando éste fue intervenido de una dolencia respiratoria, en marzo de 1982.
Como reconocimiento a su actuación en defensa del orden constitucional durante el 23-F, en 2011 recibió la Medalla de la Orden del Mérito Constitucional. También se le otorgó en 2010 la distinción Pablo Iglesias de la UGT de Ávila, y en 2014 el Premio Castilla y León.