Poco menos de un mes han tardado las pruebas de ADN en confirmar que los restos localizados en el cementerio de Fuendejalón corresponden a la primera alcaldesa republicana en España, María Domínguez, asesinada por los franquistas en septiembre de 1936. Un tiro en la nuca acabó con la vida de la que fuera alcaldesa de la localidad zaragozana de Gallur.
Los restos de la alcaldesa fueron localizados hace un mes y solo faltaba ya la confirmación científica de que se trataba de ella. Los arqueólogos que han trabajado en esta fosa común tenían pocas dudas de que no fuera ella. Los restos óseo localizados eran de una mujer de entre 50-60 años con un orificio de bala en la cabeza.
La propia vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, rindió entonces su particular homenaje a Domínguez a través de su perfil de Twitter.
De María Domínguez se pueden leer testimonios publicados en el diario "Ahora" y recogidos en la página web de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica. “Mis padres eran unos pobres jornaleros del campo que no sabían leer ni escribir. Naturalmente, a mí también, en cuanto pude, me pusieron a trabajar..." relataba la alcaldesa que no tuvo una vida fácil, con un paso incluido por el infierno de los malos tratos.
Domínguez fue fusilada junto a otros tres hombres en la localidad e Fuendejalón, donde ahora han aparecido. Junto a su cuerpo, una peineta enterrada, el único objeto personal de la alcaldesa encontrado en la fosa.
Los restos de María Domínguez volverán a Fuendejalón, pero ya no a una fosa común, sino a una sepultura "digna", explican desde la Asociación de Familiares y Amigos de los Asesinados y Enterrados en Aragón, que han promovido su exhumación e identificación.