El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, y el ministro de Sanidad, Salvador Illa, han comparecido de forma conjunta para anunciar el nuevo mapa de la desescalada en España. Ante la positiva evolución de la pandemia de coronavirus en nuestro país, --que en los últimos 7 días ha dejado 38 fallecidos y 182 casos diagnosticados en el día previo--, estos son los territorios que han logrado un nuevo cambio de fase:
Fase a fase, a distintas velocidades y de forma paulatina, España consigue avanzar poco a poco en el camino de la desescalada en busca de la denominada ‘nueva normalidad’; esa que con la que ya empiezan a soñar las pequeñas islas de La Graciosa, La Gomera, el Hierro y Formentera, pero que poco a poco esperan conseguir todos los territorios. De momento, un total de 45.000 ciudadanos de esas islas podrán disfrutar de la fase 3, mientras que el 70% de España camina ya en fase 2 y un 30% espera en fase 1 a poder dar la próxima semana un nuevo salto.
Siempre desde el respeto a un virus que ha probado tener un poder de contagio altísimo y muy rápido, lo cierto es que la evolución de la epidemia en España es “muy buena” y los datos, tal como ha manifestado el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, “avalan el proceso” y “las decisiones” adoptadas “en la línea de disminuir la epidemia y tener menos casos”. El “esfuerzo ejemplar de todos los ciudadanos y el conjunto de los sanitarios”, así como de los trabajadores de sectores esenciales que han ayudado a combatir la crisis, permiten hablar hoy de una “tendencia positiva sostenida” que habilita a los territorios a seguir progresando en la desescalada.
“Los datos son cada día de mayor calidad, llegan más rápido y más a tiempo para tomar decisiones precoces y controlar de forma precoz todos los posibles casos y brotes”, ha apuntado Fernando Simón, señalando que los “pequeños brotes” que van surgiendo se producen “de forma muy localizada” y la detección precoz está permitiendo “acciones muy locales” que impiden que la situación se descontrole o se extienda de una forma más global.
La transmisión del coronavirus en España, actualmente, es “muy baja”, pero Sanidad no quiere pasos atrás: “Seguimos teniendo riesgos importantes”, ha dejado claro el epidemiólogo, quien ha advertido que “tenemos que tener mucho cuidado con las actividades personales”, llamando a la responsabilidad individual. “Pasar de fase no quiere decir olvidarnos de las medidas de prevención”, ha subrayado, destacando la importancia de que cada ciudadano esté involucrado en el objetivo de “reducir los riesgos de transmisión; tanto para nuestros familiares como cuando salgamos de casa con personas con las que nos crucemos, con las que estemos o con las que nos podamos mover”.
Este mismo jueves, era el consejero de Sanidad del Gobierno ceutí, Javier Guerrero (PP), el que hacía ver su “gran preocupación” al haberse registrado un “repunte inusual y muy importante” que ha elevado a 22 los casos activos y ha obligado a aislar a 271 personas por haber estado en contacto con el coronavirus. "A nivel epidemiológico hemos superado a Murcia, Baleares, Melilla e incluso Andalucía y actualmente tenemos una cifra de aislamientos y casos que no ocurre ni en Madrid" lamentaba, reconociendo, incluso, la posibilidad de un retroceso en la desescalada que le hiciese bajar de la fase 2 incluso hasta la 0.
Sobre ello se han pronunciado tanto Fernando Simón como Salvador Illas, quienes han rebajado la alarma para asegurar que el brote “está bajo control”.
“He hablado hace poco más de una hora con el consejero de Sanidad en Ceuta. Ha habido un mecanismo de detección precoz que ha funcionado. En principio, si las cosas siguen bajo control, como están ahora, no hay ninguna indicación que nos permita hacer prever que pueda haber un retroceso de fase”, ha dicho el ministro, Salvador Illa, quien ha aprovechado para alabar las actitudes de “prudencia” llegadas desde distintas comunidades autónomas y distintos territorios, refiriéndose específicamente al caso de Lérida. Allí, una fiesta ilegal de 20 personas produjo recientemente un brote después de que todos ellos se contagiaran a partir de 4 de ellos, que eran portadores del virus. Ante la situación, la consejería de Salud catalana, dirigida por Alba Vergés, decidió frenar el avance y pedir que Lérida prosiga en fase 1.
“No han pedido el cambio de fase con una actitud de prudencia que quiero reconocer y poner como ejemplo porque es lo que hay que hacer”, ha dicho Salvador Illa, antes de aseverar que “en principio, la detección precoz está funcionando”.
En esta línea, el epidemiólogo Fernando Simón ha reforzado sus palabras añadiendo: “Lo que ha pasado en Ceuta se ha detectado de forma muy precoz. Esto favorece que tengamos cada vez más confianza en los sistemas de vigilancia. El volumen que se ha detectado es perfectamente manejable. No solo se trata de que haya casos de más sino de que sean manejables: de la capacidad de manejarlo”, ha dicho.
En este sentido, “el problema”, ha explicado, estaría en “los posibles contactos que en un futuro a lo mejor desarrollan síntomas”, pero considera que “Ceuta está haciendo un buen seguimiento” y ahora, ha dicho, queda vigilar y esperar a “que los acontecimientos se desarrollen”. “Por ahora la capacidad de control parece muy adecuada”, ha insistido.
Por otra parte, Salvador Illa se ha referido también a otros brotes detectados en Totana, Murcia, y en Cuenca, Castilla-La Mancha.
Respecto al primero, el ministro de Sanidad ha recordado que “se tomó una decisión de, durante unos días, pausar la evolución y permanecer en fase 1”, lo que, tras una semana, ha dado los resultados positivos esperados facilitando que, por fin, el próximo lunes la Región de Murcia, en su totalidad, esté en la fase 2.
Por su parte, en cuanto al caso de Cuenca, Illa ha apuntado que “Castilla-La Mancha ha hecho una detección muy eficaz” y ha vuelto a insistir en la importancia de mantener una “actitud de prudencia” y “la responsabilidad individual”.
En cualquier caso, Fernando Simón ha explicado que, por el momento, lo que se están observando son “brotes concretos” que se “circunscriben a poblaciones muy concretas, identificadas y a las que se puede establecer un nexo concreto entre un caso y el siguiente”. Son “reducidos” y bien localizados, ha dicho, apuntando que ello posibilita, por medio de la detección precoz, llevar a cabo acciones quirúrgicas y muy específicas.
En este sentido, añade, los brotes que surgen se van “identificando” al tiempo en que se “verifica” que no supongan “un riego de transmisión comunitaria dentro de un núcleo muy bien identificado”.
Durante la comparecencia, los periodistas, con la tradicional ronda de preguntas han cuestionado a Illa y Simón al respecto de las posibilidades de que una segunda ola se produzca en el futuro, ahora que ya incluso la OMS afirma que “el virus tendrá dificultades para sobrevivir” y deja ya lugar a la duda donde antes solo existía temor.
“La OMS no es que diga que no vaya a haber una segunda oleada. Sí que es cierto que plantea las dudas que tenemos todos desde el principio”, ha aclarado Fernando Simón, añadiendo: “A medida que vemos cómo evoluciona el virus y viendo el control en todos los países, en algunos, como el nuestro, se está viendo un efecto espectacular de las medidas que hemos implementado; este confinamiento ha controlado de manera espectacular la transmisión”, ha dicho. Ello, dice, “está permitiendo abrir un periodo ideal en el que no hubiera una segunda onda”, pero, todo eso se sitúa en el marco de “una hipótesis”. Por eso, ante todo insiste: “No podemos fiar nuestras medidas de prevención y control a una hipótesis que todavía no puede estar avalada por datos reales”.
En este contexto, el epidemiólogo incide en que “ahora mismo los países del hemisferio sur están incrementando sustancialmente su transmisión”, al tiempo en que señala, no obstante, que “también sabemos que si hay un control bueno de la transmisión, y si dentro de 3 o 4 meses no tienen mucha transmisión, la probabilidad de una segunda ola sería menos fácil”.
En cualquier caso, afirma, “sí que se seguirán manteniendo los incrementos puntuales” de brotes, señalando que no se sabe “cuántos pueden terminar convirtiéndose en epidemias nacionales”. “Y no sabemos si alguna puede acabar dando una situación pandémica”.
“Siempre ha habido una duda sobre si esa segunda onda puede existir o no. Ahora mismo los datos que tenemos es que la probabilidad puede ser que no sea tan dura o tan fuerte. Nuestra acción debe basarse en el riesgo de que se produzca”, ha sentenciado.
En el marco de la comparecencia, los periodistas también han preguntado a Salvador Illa y Fernando Simón al respecto de cuestiones susceptibles de polémica y controversia, como el tira y afloja con la Comunidad de Madrid en la desescalada, la autorización de la manifestación del 8M o las querellas contra Fernando Simón.
Respecto a lo primero, Illa ha confirmado que el Ministerio de Sanidad ha optado por no autorizar las medidas de flexibilidad solicitadas desde el gobierno regional presidido por Isabel Díaz Ayuso, entre las cuales se contemplaba la apertura con aforo limitado de centros comerciales, la vuelta de alumnos de 2º de Bachillerato a clases de refuerzo a partir de este lunes o suprimir las franjas horarias de paseos los fines de semana. “No está previsto flexibilizar”, ha recalcado el ministro, indicando que, por tanto, Madrid permanecerá sujeto a las medidas propias de la fase 1.
“Ha pedido algunas medidas de flexibilización de la fase 2, también nos lo han pedido otras comunidades, pero nosotros somos partidarios de mantenernos con las medidas que están permitidas en las fases", ha insistido, añadiendo, no obstante, que Madrid está “evolucionando muy bien”.
Por otro lado, y en otro orden de las cosas, el ministro se ha referido también a la enésima pregunta al respecto de por qué se autorizó la manifestación del 8M, algo que ha respondido haciendo alusión a que se siguieron “todas las recomendaciones internacionales” que había vigentes en ese momento. “Nosotros no vamos a entrar en ningún juego de predecir el pasado. Es demasiado obvio y no vamos a perder demasiado tiempo”. “El 8M hicimos lo que teníamos que hacer con la información que teníamos en esos momentos. En esos ejercicios de predicción del pasado no voy a entrar. Hemos tomado decisiones con la información disponible”, ha dicho el ministro, que del mismo modo en la Comisión de Sanidad del Congreso, horas antes, apuntó que había informes de la propia Comunidad de Madrid de tres días antes del 8M “diciendo que se puede hacer una actividad normal”.
Salpicado por la polémica sobre la autorización de la manifestación, Fernando Simón, quien recientemente ha sostenido que si ésta tuvo un impacto sobre la transmisión del coronavirus fue “marginal”, señalando a otros factores como mucho más determinantes en una ciudad con “alta concentración de personas”, como por ejemplo, la movilidad en metro, el epidemiólogo se ha referido a la denuncia que ha recibido en relación a su gestión de la crisis.
“No he recibido nada. No sé exactamente de qué se me denuncia o no. En todo caso, si hay alguna información o solicitud de comparecencia haré lo que el poder judicial, los jueces, me digan lo que tengo que hacer. No tengo nada que ocultar al respecto. Ahora tampoco estoy para centrarme en este tipo de cosas. Ahora mismo estoy centrado, como todo el Ministerio, en hacer el trabajo lo mejor que podamos. Estamos dejándonos la piel en ello. Si hay que sacar tiempo para esto otro, lo haremos, pero ahora mismo no puedo decir más porque yo no sé nada. No puedo ir más allá”, ha manifestado, dejando claro que no va a dejar de hacer su trabajo “con todo el esfuerzo que pueda”.
“Si alguien decide que tiene que poner a otra persona en mi lugar yo lo aceptaré y me echaré a un lado, pero desde luego lo que no voy a a hacer es abandonar el barco. Voy a hacer que los equipos estén lo mejor dirigidos que yo sepa. No voy a abandonar por evitar riesgos o la exposición que pueda tener. No debo dejar las cosas a mitad sino que debo hacer el máximo que pueda” ha recalcado, instantes antes de recibir el respaldo y el apoyo del ministro, que ha manifestado que tiene un “trabajo demasiado desconocido y tan relevante como el de otros profesionales sanitarios”. “Sirva el ejemplo del doctor Simón para el buen trabajo que se está realizando. Siento orgullo de contar con él al frente”, ha dicho Salvador Illa.