El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas aprobaron el nuevo documento de Declaración de Actuaciones Coordinadas Frente a la COVID-19 en el seno de Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. El nuevo acuerdo establece un horario común para toda España para el cierre de bares y discotecas en el proceso de desescalada de la pandemia.
Pero el acuerdo no fue unánime y seis comunidades votaron en contra. La Comunidad de Madrid ya ha dicho que no acatará el documento, porque no lo entiende “de obligado cumplimiento” al no haber sido ratificado por unanimidad. Euskadi también ha adelantado que tampoco lo acatará.
Los horarios de cierre de la hostelería prometen una nueva batalla entre algunas Comunidades Autónomas y en Gobierno en este momento de la pandemia y esa batalla vuelve a estar encabezada, una vez más, por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Madrid espera que el Ministerio de Sanidad rectifique y busque el consenso con todas las comunidades autónomas para llegar a un acuerdo sobre las nuevas restricciones en materia sanitaria. La presidenta en funciones de la Comunidad de Madrid ha tildado de "imposición política" y "no sanitaria" el acuerdo, durante su visita a las obras de la Gran Vía madrileña.
La principal polémica viene porque las restricciones a la reapertura del interior de la hostelería y del ocio nocturno se miden por el famoso “semáforo” que se aprobó el pasado mes de marzo. Así, el documento sólo permite comenzar a reabrir bares de copas y discotecas en regiones con una incidencia acumulada por debajo de 150 casos por 100.000 habitantes. Madrid tiene actualmente 168 y afirma que no acatará el acuerdo.
Así lo ha asegurado el consejero de Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Enrique López, en una entrevista a ‘Onda Madrid’, donde ha insistido en que Madrid va a seguir aplicando los criterios y decisiones que establezca su Consejería de Sanidad. El consejero madrileño ha recalcado que desde el Ejecutivo autonómico entienden que el documento no es "un acto de obligado cumplimiento", recordando que ya en octubre se recurrieron ante la Audiencia Nacional sendos acuerdos de órdenes del exministro Salvador Illa.
"Los acuerdos que se adoptan solo obligan cuando son unánimes o cuando no hay votos en contra porque lo dice la Ley que lo regula. La competencia en materia sanitaria es solo de las CCAA y el Estado tiene la competencia de coordinar. No puede ser una imposición. Hay que buscar consenso", ha asegurado.
"La Comunidad va a seguir aplicando las normas y criterios en virtud de su competencia exclusiva. Esperamos que Darias haga gala de ese consenso que tanto predica y esa co-gobernabilidad abriendo un periodo de búsqueda de consenso", ha subrayado.
"Si la ministra entiende que ese acuerdo es de obligado cumplimiento, en Madrid entendemos que no. Ya lo tenemos recurrido desde el mes de octubre. Siempre van en contra de sus propios actos. Ahora nos advierten de que en verano puede aumentar el riesgo. La diferencia es que está la vacunación y no puede haber medidas más restrictivas que durante el estado de alarma. No tiene rigor y jurídicamente no puede ser obligatorias", ha añadido el consejero madrileño.
Aunque Madrid afirma que no acatará el documento aprobado por el Gobierno y la mayoría de regiones en el Consejo Interterritorial de Salud, de momento la Comunidad no reabrirá el ocio nocturno. Actualmente, Madrid es una de las regiones que permanece con una Incidencia Acumulada superior a 150 contagios por 100.000 habitantes, lo que la dejaría fuera de la opción de reapertura planteada en el acuerdo.
Así lo ha asegurado Enrique López, que ha apuntado que la Comunidad de Madrid no va a reabrir por ahora el ocio nocturno y que lo hará en función de la situación epidemiológica. El consejero ha anunciado que se ha reunido recientemente con el sector para que les presenten un plan específico de desescalada que será evaluado por la autoridad sanitaria. "Tenemos una autoridad seria y responsable", ha señalado al respecto.
Así, aunque se ha manifestado en contra del documento, Madrid, en la práctica, no se saltará las medidas por el momento, ya que decide no reabrir el ocio nocturno y seguirá recabando información y tomará decisiones dependiendo de la situación sanitaria.