El juez instructor de la causa del 'procés' independentista, Pablo Llarena, ha acordado este viernes mantener la vigencia de las euroórdenes de detención y entrega dictadas contra el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y su exconsejero Toni Comín, ambos huidos en Bélgica, y pide el suplicatorio al Parlamento Europeo para que suspenda sus inmunidades.
Por otro lado, Llarena ratifica la orden de detención en territorio español, donde si son arrestados no les alcanzaría la inmunidad al estar ya procesados y no se requeriría suplicatorio. Asimismo, en un auto dado a conocer este viernes, el magistrado pide a Bélgica que deje sin efecto los plazos para resolver sobre las euroórdenes hasta que el Parlamento Europeo decida sobre los suplicatorios.
La resolución argumenta, para justificar que se alce la inmunidad que les reconoce su condición de europarlamentarios, que los hechos imputados a ambos líderes independentistasson muy anteriores a su elección y no guardan relación alguna con su actividad en la Eurocámara. Por último, inadmite la recusación contra él por extemporánea.
La decisión la ha adoptado después de estudiar los informes de las partes sobre la posible incidencia que debe tener la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), que reconoció la inmunidad del exvicepresidente de la Generalitat y líder de ERC Oriol Junqueras desde que fue proclamado eurodiputado el 13 de junio.
La Fiscalía pidió al magistrado instructor que mantenga tanto las órdenes nacionales e internacionales de detención y la declaración de rebeldía de ambos procesados por el 'procés' independentista. No obstante, la Abogacía del Estado mantiene una postura parcialmente contraria, ya que ha pedido que suspenda las euroordenes. En lo que sí coinciden ambas acusaciones es en que el juez Llarena debe pedir "a la mayor brevedad" el suplicatorio a la Eurocámara.