"Cada gramo de este hierro se os va meter en vuestras cabezas o en la de vuestros hijos o mujeres". "Para que sepáis que el musulmán tiene la dignidad y la fuerza con el poder de Dios". Nos han prometido la vida eterna y a vosotros el infierno. Hay millones de musulmanes para haceros llorar sangre". Son algunas de las sentencias que salen de la boca de Younes Abouyaqooub, Youssef Aalla y Mohamed Hichamy, imágenes impactantes, cuyas grabaciones realizó uno de los acusados Mohamed Houli, dos días antes de los ataques. Houli fue herido en la explosión del chalé que precipitó los ataques en la Rambla de Barcelona y el Paseo Marítimo de Cambrils.
En los vídeos aparecen Mohamed Hichamy, que junto a otros cuatro terroristas fue abatido en Cambrils tras matar a una mujer, y Younes Abouyaqooub, el terrorista de la Rambla abatido días después por los Mossos, y Youssef Aalla, que falleció junto al imán de Ripoll cuando estallaron de forma accidental los explosivos en el chalé de Alcanar el 16 de agosto. La explosión obligó a la célula a improvisar sus planes terroristas. El plan inicial era usar los explosivos para causar una masacre atentando contra la Sagrada Familia, entre otros objetivos.
En las imágenes ya se contempla que estamos ante un grupo de aficionados capaces de odiar para hacer daño. "Os vais a arrepentir de haber nacido", señala Hichamy en otro momento entre las risas del grupo, para después, en catalán, focalizarse en la policía catalana: "Sobretodo vosotros Mossos d'Esquadra, os estáis metiendo en un berenjenal que no sabéis dónde os habéis metido". No se para ahí, entre las risas del grupo, señala ante la cámara que "el presupuesto de cada granada no se cuánto es porque todo lo he traído de mi trabajo. Os mataremos con vuestro dinero. Cada gramo de este hierro se va a meter en las cabezas de vuestros hijos y vuestras mujeres con el permiso de Dios".
Ahora ya no hay risas en el juicio. Porque todos sabemos lo que les ocurrió a los terroristas y porque los que sobrevivieron ahora niegan todo. Mohamed Houli Chemlal, acusado de formar parte de la célula yihadista que atentó en Cataluña el 17 de agosto de 2017, ha asegurado ante el tribunal de la Audiencia Nacional que juzga estos hechos que ratifica todo lo que ha declarado hasta ahora y ha afirmado que está "arrepentido". Ahora dice que grabó estos vídeos por miedo, para pasar desapercibido en la célula terrorista. La misma que anunciaba una masacre que finalmente se produjo.
Houli Chemlal es el primero de los tres acusados en el juicio que ha comenzado este martes en declarar ante el tribunal de la Sección Tercera de la Sala de lo Penal, presidido por Alfonso Guevara. Tras un habitáculo de cristal, donde se encontraba acompañado de los otros dos acusados, ha recordado que durante la instrucción de la causa declaró voluntariamente. Asimismo, este acusado, que resultó herido por la explosión de una vivienda en Alcanar (Tarragona) donde se preparaban los explosivos para atentar en Barcelona, ha indicado que se acoge a su derecho a no declarar pero que ratifica todo lo que ha dicho hasta ahora en este procedimiento y ha mostrado su arrepentimiento. "Mi arrepentimiento se basa en que todas las veces que me han llamado para declarar he declarado, incluso he declarado voluntariamente", ha afirmado a preguntas de su abogada, María del Carmen González, quien le ha preguntado si era un sentimiento "sincero". "Obviamente", ha dicho Holui Chemlal.
A petición de la fiscal Ana Noé, la Sala ha visionado vídeos y fotografías en los que aparece el acusado manipulando explosivos con otros miembros de la célula yihadista. También se han reproducido las declaraciones que prestó ante el entonces titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 Fernando Andreu, ya que la representante del Ministerio Público considera que incurrió en contradicciones en sus comparecencias.
La Fiscalía solicita para Houli Chemlal la pena más alta para los tres acusados, 41 años de cárcel por los delitos de pertenencia a organización terrorista, tenencia, depósito y fabricación de explosivos, y conspiración para cometer estragos terroristas, al entender que "formó parte de una célula criminal local seguidora de los postulados de la organización terrorista Estado Islámico reunida en torno a la figura del fallecido imán que fue de las comunidades 'El Fath' y 'Annour'", de Ripoll.
En el escrito de acusación provisional añade que "mantenía" con el imán una "buena relación de amistad" y que comenzó a "mostrar interés por el islam y a asistir también regularmente a la mezquita". A preguntas de su defensa, Holi Chemlal ha afirmado con un simple "sí" a varias preguntas sobre su colaboración con la justicia, como que contactó voluntariamente con el equipo de seguridad del centro penitenciario de Alcalá-Meco para asumir los hechos, si bien el interrogatorio de la abogada ha sido interrumpido en varias ocasiones por el presidente del tribunal porque el acusado estaba respondiendo cuando inicialmente se había acogido su derecho a no declarar.
El juicio por los atentados yihadistas de Barcelona de hace tres años ha causado una gran expectación. Aún no se han olvidado los ataques que acabaron con la vida de 16 personas e hirieron a más de 100. Solo tres terroristas serán juzgados pero ninguno por asesinato. Los autores materiales murieron en la explosión de la casa de Alcanar o abatidos por la policía. Para Driss Oukabir, su documentación estaba en la furgoneta de Las Ramblas, la Fiscalía pide 36 años de cárcel.
Mohamed Houli Chemlal, el único superviviente de la explosión de la casa de Alcanar, donde manipulaban los explosivos se enfrenta a la petición más alta: 41 años de cárcel. Y el último de los acusados es Said Ben Iazza prestó su furgoneta para comprar los explosivos y le piden ocho años por colaboración.
Ninguno de ellos será juzgado por el asesinato de las 16 personas que murieron en los atentados de Las Ramblas y Cambrils y los casi 140 heridos. Son juzgados por pertenencia o colaboración con organización terrorista, fabricación y tenencia de explosivos y estragos en grado de tentativa… Su participación en los atentados no ha quedado acreditada. Aun así algunos familiares mantendrán esta acusación en el juicio.
El resto de los yihadistas murieron. El conductor de la furgoneta fue tiroteado tras varios días de fuga, cinco terroristas murieron durante el tiroteo en Cambrils y dos más en la explosión de la casa de Alcanar, donde falleció el líder de la célula, el imán de Ripoll.