Eran otros tiempos. Isabel Díaz Ayuso y Pablo Casado, amigos de alma en las Juventudes del PP. "Como hermanos desde entonces, son 17 años juntos", aseguraba la presidenta madrileña en una entrevista en el programa Mi casa es la tuya, emitida en junio de 2021.
Por eso, cuando el 20 de junio de 2018 Casado presentó sus avales para presidir el PP, ¿quién estaba con él? Ayuso. Y, un mes después, cuando ganó, allí estaba ella también, a su lado....
Seis meses después, él le devolvió el gesto: la eligió a dedo como candidata a la presidencia de la Comunidad de Madrid. "Pablo, vamos a ganar las elecciones por ti", aseguró Ayuso.
Todo, ante el estupor entonces de parte del partido, por su bajo perfil político. Casado arriesgó, quería gente de confianza, y acertó. Con ella, el 27 mayo de 2019, se celebró la primera victoria de la era Casado, su triunfo como presidenta de la Comunidad de Madrid.
Ayuso, en la segunda fila de la política entonces, había contado con la ayuda de Miguel Ángel Rodríguez, ex mano derecha de Aznar. "Soy su jefe de Gabinete, que significa que es el primero que recibe la bronca por la mañana", aseguró él en el programa Mi casa es la tuya Rodríguez. "Por supuesto, y el último que se la lleva", respondía entre risas la presidenta madrileña.
Con la llegada al poder, ocurrió que Ayuso comenzó a tener discurso propio: "Antes de nada y por encima de todo soy presidenta de la Comunidad de Madrid". Desmarcándose a veces de la línea nacional en las elecciones de 2021, con roces como la inclusión por parte de Génova de Toni Cantó, ex de Ciudadanos, en sus listas. "Y por eso yo quiero encabezar y dirigir ahora este proyecto en los dos próximos años en libertad", proclamaba ella.
Pero la fractura se haría evidente con el Congreso del PP de Madrid. "Cuando se convoque me presentaré, no hay más novedades", decía Ayuso. "De momento no hay ningún Congreso convocado, con respecto a los congresos regionales eso se irá viendo poco a poco", respondía el secretario general del PP, Teodoro García Egea.
"Que no es una cuestión de que se adelante nada, sino sobre todo de que no se deje de retrasar, que no se siga retrasando la voz a los afiliados", replicaba ella.
Choques con los que se dudó de si Ayuso realmente lo que quería era quedarse con el puesto de su jefe. "Hoy te quiero decir Pablo que tengo meridianamente claro dónde está mi sitio y sé que mi sitio es Madrid", le dejaba claro ella en octubre del año pasado.
Momentos de tregua, pero también llamadas al orden. "Aquí no caben los solistas, somos una orquesta afinada, armónica, en la que lo que prima es un proyecto, una partitura fuerte y unida", aseguraba Casado un mes después. Lo último, ya es sabido por todos.
Casado se ha encontrado con que su antigua amiga ha acabado ganando en popularidad. Quienes tanto se apreciaban han terminado lanzándose cuchillos sin tapujos, y delante de toda España.