A partir de mañana, los test de antígenos costarán en las farmacias como mucho 2, 94 céntimos. Algunos farmacéuticos, los más previsores que adelantaron sus compras, ahora se encuentran con stock que tendrán que vender por debajo del precio que pagaron. Luis González, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Madrid muestra a las claras una factura del 31 de diciembre, en plena demanda de test de antígenos, facturas a 3,90 euros de precio de compra. Esos son los mismos test de antígenos que el Gobierno ha decidido que se vendan a partir de mañana a 2,94 euros.

Irene Diego es farmacéutica de Barcelona y está en la misma situación. Fueron previsores porque sus clientes demandaban test y ahora van a tener que venderlos a precio por debajo de coste. En Cataluña estiman que hay un millón de test en stock en las farmacias, todos comprados semanas atrás por encima del precio que ha fijado el estado. Antonio Torres, presidente de la Asociación de Farmacias de Cataluña, reconoce que tuvieron pocos test cuando más demanda había, por lo que se dispararon los precios y cree que la medida del Gobierno llega tarde y mal.

Alberto Lamenca, farmacéutico reconoce que tuvieron que hacerse con un stock para atender las peticiones de la población, y ahora van a ser los damnificados. Lo hacen con gusto, arrimando el hombro, pero dejan en evidencia que en su momento sufrieron las iras de la población por la especulación de precios por falta de stock y ahora también van a perder dinero con los test de antígenos.

Leire Andraca, farmacéutica, es uno de los rostros que ha hecho el doble sacrificio. Querían que las farmacias participara para ayudar en la pandemia y atención primaria. En Navidad buscaron test donde fuera y al precio que fuera para atender la demanda y ahora esto. Los proveedores ahora también están buscando la fórmula para bajar el precio y ofrecerlo a un precio más bajo.

"Estamos en un sector muy intervenido y nos ha tocado a nosotros pagar como justos intermediarios. Nosotros queremos arrimar el hombro y atender las necesidades de la población. La atención primaria necesita una ayuda", reconocen, pero dejan claro que están ofreciendo un servicios a la sociedad. "Al final cada uno tiene que hacer sus cuentas pero a nadie le gusta vender a pérdidas ni vender ni hacer un servicio a pérdidas". Eso también es una realidad.

Lo que más les llama la atención es que Sanidad haya adquirido cinco millones de test de antígenos por 15,5 millones de euros (3,1€ cada unidad), más caro de lo que lo van a vender ellos. Y se plantean una posible solución. "Quizás el gobierno debiera subvencionarlos cómo se está haciendo en otros países de Europa. Se podría bajar bastante el precio", señalan. Lo que esperan es que ahora no nos encontremos con un desabastecimiento porque a los proveedores que no les compense vender en España y se vayan a otros países donde el precio superior. Mañana lo empezarán a ver.

Lidia Fernández de las Heras, técnico de farmacia, considera que estamos ante "un servicio que tenemos que dar. Nosotros trabajamos con una agrupación de farmacias y tenemos más accesibilidad a unos precios mejores y tampoco vamos a perder demasiado pero sí que es cierto que muchas otras farmacias se verán afectadas porque en el tema de la Navidad su boom y la gente compraba de 10 en 10 y de 20 en 20 así que seguramente haya farmacias que tengan muchos y que hayan comprado un precio no tan razonable como nuestro caso.