El Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo ha avalado las ‘devoluciones en caliente’ de migrantes en la frontera de Melilla al considerar que son legales y que no vulneran los derechos humanos. La Gran Sala contradice así a la sentencia emitida en 2017 por el mismo tribunal en la que condenó a España por expulsar a Marruecos de forma inmediata a dos inmigrantes que saltaron la valla en agosto de 2014.
Este tipo de expulsiones fueron regularizadas en 2015 por el Gobierno de Mariano Rajoy con la figura del ‘rechazo frontera’ incluida en la Ley de Seguridad Ciudadana. Tras la llegada del PSOE al Gobierno se siguieron realizando.
En 2017 España fue condenada por expulsar de forma inmediata a un ciudadano de Mali y otro de Costa de Marfil a Marruecos, tras encaramarse a la valla de Melilla el 13 de agosto de 2014. El Tribunal las consideró contrarias a la Convención Europea de Derechos Humanos.
El Gobierno de Mariano Rajoy recurrió la sentencia argumentando que los migrantes que saltan la valla hispano-marroquí no pisan suelo español hasta que no sobrepasen a los agentes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado que la custodian.
Los socialistas se comprometieron a paralizar las devoluciones en caliente pero a su llegada al Gobierno en 2018 decidieron mantener el recurso y esperar a la resolución del Tribunal Europeo antes de suprimir la práctica.