Pedro Sánchez ha logrado una victoria política pese a todos y ha vuelto a demostrar su resistencia logrando aprobar seis decretos sociales: un plan de contingencia ante un posible brexit sin acuerdo (el único que según la oposición tenía carácter de urgencia); la ampliación de los permisos de paternidad; los subsidios para los parados mayores de 52 años; el decreto sobre las medidas para el alquiler; el de la estiba; y el del superávit de ayuntamientos y comunidades autónomas. Lo ha hecho con el apoyo de los grupos que le llevaron a la presidencia del Gobierno al prosperar la moción de censura, incluido Bildu, lo que ha provocado las críticas furibundas del PP.
No logró, sin embargo, aprobar los Presupuestos, pese a su encuentro con Torra en Pedralbes, que también provocó el disgusto de la oposición. Casado le calificó de traidor y felón cuando la figura del mediador se coló en las conversaciones con los independentistas. El Gobierno dio marcha atrás y la oposición salió a la calle provocando la foto de Colón.
Los analistas políticos consideran que este ha sido un balón de oxígeno para el líder del PSOE, que está llevando a cabo una campaña de perfil bajo en la que los viernes sociales son su gran lanzadera, criticada por su populismo por la oposición. En este contexto, una foto con Obama, con el que habló del cambio climático, le ha valido a Sánchez lo que más ha potenciado, Falcón incluido, estos meses: viajes internacionales para adquirir la etiqueta de hombre de Estado.
No obstante, el caso de Ángel, capaz de acabar con la vida de su mujer para poner fin a su sufrimiento, contado en exclusiva por Cuatro al día, inició la entrevista y puede convertirse en un tema de campaña. Un tema en el que el PSOE tiene las cosas claras. "Yo la verdad es que estoy sobrecogido, emocionado e indignado El PSOE ha presentado una iniciativa para el bien morir, y en 19 ocasiones el PP y C's lo han impedido. El compromiso con las personas que sufren como María José es firme y si tengo mayoría parlamentaria no se bloqueará".
No hay unanimidad, no obstante, en la manera de tratar el caso catalán, que ha provocado fugas de personalidades emblemáticas del partido hacia Ciudadanos. Sánchez apuesta por un diálogo que no parece dar sus frutos hasta el momento, con Iceta como globo sonda con las ideas más cercanas a los independentistas, referéndum incluido.
El presidente del Gobierno ha querido dejar claro que los españoles deben votar porque una victoria de la derecha es posible. Y considera que ir a votar, en este caso a su partido, está por delante de los socios porque es el único partido que puede pararlos. Su idea es gobernar con independientes de prestigio, pero no ha querido dar nombres de partidos como socios que a día de hoy serían Podemos e independentistas. No se ha callado tampoco el presidente al juzgar el caso Villarejo sobre Podemos. "Deben estar tranquilos, porque este Gobierno está aportando toda la información a la justicia. Entiendo la indignación de Iglesias, pero todos los involucrados van a pagarlo. Hasta que no haya sentencia firme el Gobierno no puede actuar", ha dicho.
Sánchez ha señalado que él "era conocido por el 'no es no'" y lo ha argumentado porque "quiso mantener sus principios", y por eso dimitió. Así mismo, ha afirmado que "no va a haber independencia, y los independentistas lo saben", precisando, no obstante, que "hay que acabar con la confrontación y el Gobierno ha dialogado respetando la Constitución".
Piqueras le ha señalado que en sus 110 propuestas Cataluña no aparece. El presidente lo ha justificado señalando que los catalanes también se beneficiarán de las medidas sociales. "No es no, la independencia no es posible", ha repetido Sánchez. La receta para Cataluña es la misma que para España, recuperar derechos que han sido recortados por el PP. El líder del PSOE ha criticado la deslealtad con el Estado, las instituciones y el Gobierno por parte del PP y de Ciudadanos. "O vamos a la confrontación o al diálogo dentro de la Constitución y los Estatutos".
A los líderes independentistas les ha recomendado que "salgan y confiesen a la gente que les han seguido que les han engañado" después de que hoy en el Parlament las voces para que convoque elecciones hayan crecido. "Yo no consentiré la unilateralidad". Sánchez ha dejado claro que los catalanes "no quieren la independencia, lo han demostrado votando. Se lo he dicho a Torra, ustedes tienen un problema de convivencia, la parte nacionalista debe reconocer a los no independentistas. Es el autogobierno el que une". De hecho, el presidente ha acusado a los independentistas de querer romper España, porque quebraron de manera unilateral la legalidad y por eso se aplicó el 155. No está de acuerdo Sánchez con eliminar la autonomía. Y ha recordado que con Rajoy, al que ve más centrado que a Casado, se intentó siempre "medir la proporcionalidad y el consenso". Cree que la receta para Cataluña es la misma que para España: en su opinión, un Gobierno del PSOE para "recuperar los derechos que han sido recortados por el PP".
El secretario general del Partido Socialista ha aplaudido al Supremo y no ha querido señalar si dará indultos: "Cuando haya sentencia responderé a la pregunta de los indultos", pero ha querido aplaudir la labor de los jueces, que han dado y dan una gran imagen de España en el exterior.
Ha tenido hueco en la entrevista Vox, el partido que copa hoy portada y minutos de televisión. "La ultraderecha siempre ha existido, no es novedad. No van a ganar las elecciones, nunca, pero radicalizan al PP y C's, poniendo consensos en cuestión. Con la homofobia, el sistema público de pensiones, la ley de violencia de género". Eso, dice Sánchez, es lo que le preocupa de Vox.
Respecto a Obama, Sánchez dejó clara su admiración hacia él. Hablaron, según el presidente, de la gente joven, de los desafíos del cambio climático. Lo que sí ha dejado caer es que en Europa se ve con extrañeza la cercanía de C's y el PP con Vox. "En este sentido me ha decepcionado Rivera con el que yo firmé un pacto", ha dicho.
Para finalizar la entrevista, Sánchez ha puesto en duda que las pensiones se mantengan con el PP. Su número cuatro, Lacalle, habla ahora de un sistema mixto y de mantener su aumento un 0,25% y eso sería "una merma en el poder adquisitivo de los pensionistas que llegará al 30%". "Nosotros blindaremos las pensiones en la Constitución y su revalorizaciónAsí, al final, ha llegado la promesa de la entrevista. Sánchez se compromete a blindar las pensiones como piden los pensionistas. Veremos cómo se combina eso con Bruselas, el déficit y la realidad económica, pero la promesa, rotunda, está ya encima de la mesa.
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