Los pactos entre fuerzas políticas de distinto signo determinarán el gobierno de diez comunidades autónomas donde ningún partido ha obtenido mayoría suficiente como para regir en solitario, situación que solo se ha dado tras las elecciones autonómicas de este 26 de mayo en Castilla La Mancha y Extremadura, donde el PSOE ha obtenido más de la mitad de los escaños en liza.
La derecha suma en Castilla y León, Murcia y Madrid, donde una posible alianza entre el PP, Ciudadanos y VOX podría formar gobierno al margen del PSOE, ganador de las elecciones en las tres comunidades.
Sin embargo, mientras que en la Asamblea madrileña parece claro un acuerdo entre las tres fuerzas, en las Cortes de Castilla y León Ciudadanos podría forzar un cambio de gobierno y dar a los socialistas el apoyo que necesitan para hacerse con el poder, igual que en Murcia. Ocurre una situación similar en Aragón, donde la llave la tiene Ciudadanos, que suma con PP, VOX y el PAR, pero podría inclinarse por apoyar al socialista Javier Lambán, vencedor con el 30,4% de los votos.
En Canarias, si el PSOE y Coalición Canaria no llegasen a un acuerdo de gobierno, la clave la tendría la Agrupación Socialista Gomera, pues puede dar a CC los escaños que le faltan para sumar con el PP y Ciudadanos, o bien decantarse por el PSOE, Nueva Canarias y Podemos.
La situación es más complicada en Navarra, la única comunidad autónoma junto con Cantabria donde el PSOE no ha ganado las elecciones. La victoria es de Navarra Suma (UPN-PP-Ciudadanos) que obtiene 19 escaños, lejos de los 26 que constituyen la mayoría absoluta. El PSOE, segunda fuerza con 11 escaños, tendrá que decidir si les permite gobernar o deja paso a Geroa Bai (9) con Bildu (8), Izquierda/Ezkerra (1) y Podemos (8).
Respecto a Cantabria, el PRC ha sido el partido más votado, pero se queda a 4 escaños de la mayoría absoluta y podría buscarlos en el PSOE, la tercera fuerza en la región.
En el resto de las comunidades autónomas, las negociaciones serán en la izquierda. El PSOE necesita a Podemos para gobernar en Asturias y La Rioja, y en Baleares además precisará sumar el apoyo de formaciones nacionalistas para lograr mayoría suficiente.