La marcha, convocada por la asociación Hablamos Español y encabezada por una pancarta en la que se podía leer "Libertad de elección de lengua", ha tenido lugar frente a las Torres de Quart. Los participantes han portado carteles como "Respetad la lengua materna", "Mis impuestos hablan castellano" o "Blasco Ibáñez escribía en castellano". También se han oído gritos como "No a la imposición. Sí a la elección", "Nuestros hijos, nuestro orgullo, decidimos su futuro" o "Marzà, dimite. Los padres eligen".
Por otro lado, la entidad ha denunciado en su manifiesto que algunos de los docentes "expulsados" por la "imposición lingüística" del Consell tienen una "amplia experiencia enseñando en español, pero quienes gobiernan quieren convertir su herramienta de trabajo, valiosa para tantos alumnos, en una rareza en la Educación de la Comunitat".
Al respecto, han afirmado que "no existe otro país en el mundo donde se impida estudiar en la lengua oficial común": "No necesitamos citar aquí los tratados y cartas internacionales de derechos que respaldan nuestras reivindicaciones. Lo que reclamamos está avalado por el sentido común y la lógica. No es sensato ni respetuoso borrar el español de los edificios oficiales. Está fuera de toda lógica puntuar más una lengua que un doctorado", han denunciado.
"Nos ampara la Constitución Española, a través del Tribunal Constitucional, cuya doctrina ha avalado que no puede haber líneas de enseñanza en 'lengua regional' si no las hay también en castellano", han advertido. De igual modo, han reclamado que no quieren "prescindir de buenos profesionales por causa de unos aranceles lingüísticos que solo enriquecen a los que han convertido la mal llamada 'normalización lingüística' en un negocio".
"Ni en la Comunitat ni en ningún otro lugar de España queremos trabas lingüísticas; no son requisitos razonables, son barreras que nos impiden optar a empleos públicos, y que obstaculizan la libre circulación por nuestro país", han asegurado.
Asimismo, han indicado: "Lo que está sucediendo aquí nos recuerda de manera preocupante a lo que vemos en Cataluña; esa imposición que, una vez se pone en marcha, avanza, se desboca y nos arrolla". "Lo estamos viendo en las Islas Baleares, en el País Vasco, y en Galicia. Lo vemos también en Navarra, y ya asoma la cabeza en Asturias y Aragón", han advertido.
Finalmente, han señalado que "una lengua deja de ser una riqueza cuando se empeñan en convertirla en un problema". "No hay poder público legitimado para cambiar la lengua con que un padre o una madre arrulla y lee a sus hijos sus primeros cuentos, la lengua de sus afectos. Una sociedad sana no debería consentirlo", ha indicado el manifiesto.
A la marcha han asistido manifestantes como el presidente de Unión, Progreso y Democracia, Cristiano Brown, quien ha afirmado que "defender el español es defender la igualdad, porque los que fuerzan que la lengua autonómica sea la única lengua vehicular en la educación, los que discriminan al castellano, al final lo que hacen es atacar a los más débiles".