Los manteros sacan tajada de las tensiones entre el Ayuntamiento de Cádiz y la Policía Local
Desde principios de julio han quedado disueltos todos los grupos especializados de la Policía Local
Las playas se han quedado sin agentes de Policía Local
Ni grupo Charly, ni Omega, ni Barrios o Mercados o, más preocupante aún, sin grupo VioGen, dedicado a la violencia de género. La Policía Local de Cádiz lleva meses enfrentada a su alcalde, José María González, Kichi, y el resultado es que todos los grupos especializados en los que los agentes deben inscribirse como voluntarios, porque suponen horarios y funciones especiales, se han quedado sin candidatos desde principios de julio.
"Desde el año 2016 estamos exigiendo una actualización de la Relación de Puestos de Trabajo, que es la que determina nuestras retribuciones", explica Francisco Rama, secretario del sindicato UPLBA en Cádiz. "Estamos en 2020 y no hay RPT. Todo tiene un límite. ¿No hay RPT? Se acabaron los grupos voluntarios, se acabaron los servicios extraordinarios en eventos especiales, se acabó. Hasta que esta gente no cumpla su palabra vamos a estar en conflicto".
Todo tiene un límite. Se acabaron los grupos voluntarios, se acabaron los servicios extraordinarios en eventos especiales, se acabó. Hasta que esta gente no cumplan su palabra vamos a estar en conflicto
No busquen pues, en las playas de Cádiz, sus uniformes azules, lo más probable es que no los encuentren. El grupo que se ocupaba de controlar las grandes aglomeraciones ya no existe.
"Venimos todos los días y este año no los hemos visto", cuentan Chari y David, un joven matrimonio que baja con su chaval hacia Santa María del Mar. "Solamente está mantenimiento de playas y socorrismo. En años anteriores sí venían por aquí andando con sus motos por la orilla".
"Venir como antes no están viniendo", reconoce un socorrista. "Sólo si pasa algo muy fuerte vienen".
Los sindicatos policiales hablan de turnos de ocho o nueve agentes para toda la ciudad. Tampoco da, por tanto, para controlar la venta ambulante, más allá de alguna patrulla ocasional. El centro de Cádiz se llena de manteros. No se ve ni un policía local, así que los vendedores colocan con parsimonia, zapatillas, camisetas, gafas, bolsos, bajo las desesperadas miradas de los comerciantes.
"Ya ves lo que hay", señala el propietario de un pequeño comercio de recuerdos turísticos. "Vienen muy poco. Antes venían más, pero este verano están viniendo poco. Por lo visto hay problemas con el alcalde".
"Policía local nada", dice el encargado de una librería rodeada por el top manta. "Pasa de vez en cuando uno pero no llama la atención a nadie. Creo que tienen problemas con el ayuntamiento".
El asunto más espinoso, la disolución del grupo VioGen, dedicado a la violencia de género. La portavoz municipal, Ana Fernández, confirma que la labor se sigue haciendo, pero se ratifica en su opinión de que los sindicatos han utilizado el asunto como ariete en la negociación.
"Reitero esas palabras. Más allá del derecho de los trabajadores y trabajadoras a defender lo que consideran que es justo, hay algunos asuntos que son intocables", responde a NIUS la portavoz.
Han insinuado que estábamos chantajeando con este asunto. No
"Han insinuado que estábamos chantajeando con este asunto", responde Francisco Rama, desde el sindicato UPBLA. "No. El servicio se sigue haciendo. La jefatura tiene potestad para encomendar a una serie de policías que hagan esas funciones, pero al no tener la disponibilidad absoluta de antes, eso hace que también el servicio pueda resentirse".
Y mientras el verano avanza, el conflicto sigue. El próximo capítulo, en la tercera semana de agosto. Para entonces, está prevista una nueva reunión entre el ayuntamiento y la plantilla municipal.