La consellera de la Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha asegurado este sábado que "si Cataluña , si nos pudiéramos permitir cerrarlo todo, quizás lo haríamos", para intentar frenar la epidemia, que continúa empeorando con los contagios al alza desde hace unos días.
En declaraciones a RAC 1, Budó ha hecho esta reflexión, un día después de que el Govern haya adoptado nuevas restricciones para hacer frente a la covid-19, que afectan especialmente al sector de la restauración, y a sólo una semana de la celebración de la Navidad.
"Si fuéramos un país rico, si nos pudiéramos permitir cerrarlo todo, quizás lo haríamos, pero dadas las circunstancias y dado que el Gobierno español hace tiempo que está anunciando un plan de choque que no aprueba, no podemos cerrarlo todo", ha afirmado.
Según la portavoz del Govern, las nuevas restricciones en el consumo de bares y restaurantes aprobadas ayer y que entrarán en vigor el próximo lunes intentan encontrar "un punto de equilibrio para afrontar la crisis sanitaria, y la crisis económica y social".
La consellera ha defendido que el ejecutivo catalán está haciendo el máximo para ayudar a los sectores más afectados por la pandemia y ha avanzado que "si hace falta pediremos un adelanto de los fondos covid del año que viene" para mantener este apoyo económico.
Budó ha cargado contra el Gobierno español, al que ha acusado de "dejadez de funciones", y le ha reclamado que inyecte liquidez en las empresas y que relaje al mismo tiempo su política fiscal, dilatando el cobro de impuestos.
Así, ha llamado al Ejecutivo central a inyectar liquidad y tesorería a los sectores económicos y sociales, a relajar los tributos, dilatar el pago de impuestos e impulsar más políticas de acompañamiento fiscal.
De cara a las Navidades, ha explicado que desde el Govern se valoró la posibilidad de reducir el número de personas permitidas para los encuentros de los días 24, 25, 26, 31 de diciembre y 6 de enero, aunque finalmente se ha optado por mantener el límite de 10 personas.
Por eso, ha remarcado la efectividad de aplicar y cumplir las medidas para la reducción de la movilidad y la interacción social, y ha apelado a la responsabilidad ciudadana: "Hemos de tomar conciencia de lo que podemos hacer y no podemos hacer, y de cumplir las normas".
Pese al empeoramiento de la epidemia, Budó ha señalado que el Govern continúa también preparando la celebración de las elecciones catalanas el próximo 14 de febrero. "Trabajamos para que se puedan celebrar con todas las garantías sanitarias y democráticas", ha apuntado.