Los ciudadanos de Castilla y León se enfrentan mañana a una nueva duda sobre lo que pueden y no pueden hacer ante las nuevas restricciones impuestas por el descontrolado avance del coronavirus: ¿nos volvemos a casa a las 10, como hasta ahora, o a las 8?.

El vicepresidente de Castilla y León, Francisco Igea, anunciaba este viernes, cuando la comunidad suma más de 2.400 nuevos casos de coronavirus -el pico más alta de la pandemia-, nuevas medidas para intentar controlar la expansión del virus y que, básicamente son tres: cierre perimetral de las nueve provincias, reuniones de hasta 4 no convivientes como máximo y adelantar el toque de queda de las 22 horas a las 20, unas medidas que estarán vigentes durante todo el estado de alarma, es decir, hasta el 9 de mayo, con posibilidad de flexibilizarlo.

Y este último punto es el que ha abierto la caja de los truenos entre el Gobierno central y la Junta, ya que el decreto del estado de alarma impide, según el Ministerio de Sanidad, un toque de queda antes de las 22 horas, mientras que el Gobierno autonómico se acoge a una intepretación para argumentar su decisión.

El artículo 5 del Real Decreto, de 25 de octubre, establece lo siguiente: "La autoridad competente delegada correspondiente podrá determinar, en su ámbito territorial, que la hora de comienzo de la limitación prevista en este artículo sea entre las 22:00 y las 00:00 horas y la hora de finalización de dicha limitación sea entre las 5:00 y las 7:00 horas".

Y el artículo 10, relativo a la flexibilización y suspensión de las limitaciones, dice: "La autoridad competente delegada en cada comunidad autónoma o ciudad con Estatuto de autonomía podrá, en su ámbito territorial, a la vista de la evolución de los indicadores sanitarios, epidemiológicos, sociales, económicos y de movilidad, previa comunicación al Ministerio de Sanidad y de acuerdo con lo previsto en el artículo 13, modular, flexibilizar y suspender la aplicación de las medidas previstas en los artículos 6, 7 y 8, con el alcance y ámbito territorial que determine. La regresión de las medidas hasta las previstas en los mencionados artículos se hará, en su caso, siguiendo el mismo procedimiento".

A este artículo es al que se acoge la Junta para adelantar el toque de queda a las 20 horas, y su vicepresidente, Francisco Igea, ha hecho esta reflexión: el decreto del estado de alarma permite a las Comunidades limitar el toque de queda durante el horario nocturno y los servicios jurídicos de la Junta entienden que ese horario nocturno es el que va "desde el ocaso hasta el amanecer" y, por tanto avala ese límite de las 20.00 horas.

El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ha comunicado esta decisión al ministro de Sanidad esta misma mañana, antes de la entrada en vigor de las medidas que serán de obligado cumplimiento a partir de las 20.00 horas de mañana, una vez se haya publicado en el Boletín Oficial de Castilla y León.

Por su parte, el Ministerio de Sanidad ha avisado este viernes que en el marco del actual decreto de estado de alarma no cabe la posibilidad de que una comunidad autónoma adelante el toque de queda a las 20 horas. "No cabe esa restricción", ha informado el gabinete de Comunicación del Ministerio de Sanidad a través de la delegación del Gobierno en Castilla y León.

Ante esta situación, los castellanos y leoneses se enfrentan mañana a una nueva duda: volver a casa a las diez o a las ocho. Y, sobretodo: "¿nos pueden multar si seguimos en la calla hasta las 10?".