El presidente del PP, Pablo Casado, ha firmado contra la reforma de la ley educativa o ley Celaá en una carpa instalada por su partido en la plaza de las Cortes para la recogida de firmas contra este proyecto, cuyo dictamen se vota hoy en el Congreso.
Casado ha salido del Pleno una vez concluido el debate sobre el dictamen de este proyecto, que ha acabado con gritos de "libertad" por parte de diputados del PP y de Vox, entre otros, mientras la bancada socialista y la de Unidas Podemos aplaudía a la portavoz educativa de PSOE, Luz Martínez Seijo, que ha defendido la norma.
El líder del PP ha acudido a la carpa de su partido acompañado de la portavoz popular, Cuca Gamarra; de la vicepresidenta segunda del Congreso y vicesecretaria de Política Social, Ana Pastor, y de la senadora por Madrid Ana Camins.
Gamarra, que ha participado en un acto "online" de Nueva Economía Fórum, ha justificado el respaldo del PP a una enmienda promovida por el PNV y JxCat en favor de la convivencia de la enseñanza pública y concertada al afirmar que apoyarán todas las enmiendas "que puedan mejorar la ley Celaá".
La portavoz del PP ha insistido en que la ley Celaá es una "contraprestación" a los presupuestos y ha acusado al Ejecutivo de "hurtar el debate y la participación", de ahí que se haya tramitado de forma tan acelerada y nazca sin consenso ni acuerdo.
La escuela concertada, la de educación especial y el español, que deja de ser lengua vehicular, han centrado la polémica sobre esta ley. El PP, junto con Vox, se plantean recurrir esta ley al Tribunal Constitucional, como ya hicieron hace años los populares con la ley del matrominio homsexual.